Politica y religion, no tan “santa” combinacion

Publicado el 01 febrero 2014 por Luzmar

Recientemente nos hemos encontrado en todos los medio de comunicación con una noticia que si bien es cierto es una problemática que hace muchos años se viene dando, solo hasta ahora se presta la atención que se requiere, y es la mezcla no muy “santa” de religión y política.El análisis de esta temática, debe ser realizado desde dos puntos de referencia, el primero de ellos, el acelerado crecimiento de iglesias no católicas en Colombia, ya que es claro, que el monopolio de la iglesia católica en nuestro país se ha ido desmoronando a paso lento hasta llegar a lo que encontramos en la actualidad, una iglesia  un tanto diezmada y sin un poder tan representativo como en años anteriores, se estima que en la actualidad existen en Colombia 850 iglesias  o religiones ( Caracol Radio, Marzo 17 de 2008)  convirtiéndonos en uno de los países con más confesiones religiosas en el mundo, aunque muchas de ellas son consideradas “iglesias de garaje” su poder económico está creciendo sin ningún tipo de control ya que no se cuenta con los elementos jurídicos y legales que  permitan ejercerlo. Pero ¿por qué los colombianos buscamos cada vez más este tipo de congregaciones?, algunos argumentarían que se trata de la búsqueda de la verdadera fe, de un encuentro con Dios que la iglesia tradicional no brinda, de esa constante búsqueda del ser humano de un grupo que lo acoja y llene sus expectativas, para otros, es una manera de generar ingresos económicos de una manera más fácil y en poco tiempo, de enriquecerse con la fe, de encontrar una peldaño donde fácilmente puedan  lograr sus objetivos.
Por otro lado, los grupos políticos  en Colombia cuyo “noble interés” de trabajar ´por una sociedad más justa era cada vez menos seguido ´pero sobre todo más cuestionado por los electores, vieron en estas iglesias un fortín donde recuperar aquel lugar de importancia en el país, ahora, ¿qué tan rentable pudo ser este “matrimonio” en nuestro país?, los resultados saltan a la vista, partidos políticos muy fortalecidos desde el punto de vista económico, con un caudal de votos asegurados y una influencia muy marcada en sus seguidores.
Actualmente es el Partido Político Mira (Movimiento Independiente de Renovación Absoluta) quien está en el ojo del huracán, como ya todos sabemos ampliamente dado el  despliegue periodístico brindado en los últimos días, debido a unas desafortunadas declaraciones de su líder y guía María Luisa Piraquive (líder además de la Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional) que no entraremos a mencionar. Como nos hemos dado cuenta dichas declaraciones serian solo la punta del iceberg de muchos sucesos que al interior de este grupo vienen sucediendo y que cada día nos sorprenden mas, y es allí donde nos preguntamos ¿Dónde está la fiscalía, donde está la procuraduría o la contralora Sandra Morelli?, ¿por qué se hicieron de la oreja mocha ante el crecimiento desmesurado de esta iglesia?, cualquier mortal en nuestro país seria ampliamente investigado si de un momento a otro empieza a comprar propiedades en Estados Unidos, o a transportar su dinero en carros de seguridad, o  tener sedes de su empresa en diferentes lugares del país, muy seguramente sería tildado de corrupto o narcotraficante, tal ves sospecharían que hace parte de una red de trata de personas, o de órganos, pero ¿porque a estos mansos pastores nadie los investiga?, sencillamente porque al camuflarse dentro de los estamentos políticos crean una especia de blindaje que los hace inmunes a cualquier tipo de control, y esto sucede en casi todos aquellos grupos, organizaciones o personas que tienden “lazos de amistad” con el personaje político de turno.Lo sucedido con este grupo político nos debe dejar varias lecciones, la primera de ellas, no todas las personas que se dedican a profesar la fe creen realmente en su producto, es decir, no todas quieren vivir bajo los preceptos de su biblia o cualquier libro sagrado, no todos aman realmente a su prójimo como Jesús nos amo, y no todos honran el nombre del señor, definitivamente los “santos varones” en nuestra era no existen.En segundo lugar, la felicidad no está en una iglesia de garaje, en un templo lujoso o en la predica de un pastor, la felicidad ciertamente esta en servir a los demás, brindar lo mejor de nosotros mismos, enaltecer no solo el nombre del señor sino también las buenas prácticas de convivencia,Y por último, antes de depositar su voto en una urna debemos saber realmente por quien lo estamos haciendo, quien es esta persona, cual es su preparación, y sobre todo cual es su proyecto de gobierno, de qué manera me identifico con este proyecto y de qué manera me beneficiara, afortunadamente el internet es definitivamente un libro abierto, no debemos tenerle miedo a la tecnología.Pero sobre todo crea en Dios y confié en el de una manera libre y espontanea, y aprenda a separar el Yo político del Yo espiritual.
Luz Marly Arboleda Gaviria