"100 imágenes sobre la vida y la muerte de una ciudad romana única. A través de cada objeto, este libro invita a un viaje de redescubrimiento de una Pompeya escondida a ojos de cualquier turista que pueda pasear entre los miles de edificios vacíos que, aun en ruinas, sobreviven al tiempo."
"Recuerdo que, cuando pisé Pompeya por primera vez, hubo algo que llamó poderosamente mi atención: la ausencia de objetos de la vida cotidiana que contaran las mil historias de una vasta ciudad en ruinas que hoy en día sigue desafiando al tiempo. Etiquetados y perfectamente catalogados, la mayoría de los hallazgos encontrados fueron movidos en su momento a depósitos del propio yacimiento o a los almacenes y salas de museos nacionales e internacionales. Por eso decidí reescribir la historia de Pompeya a través de esos objetos que siempre había contemplado en las vitrinas y paredes de los museos: para ubicarlos en su contexto específico y mostrarlos en el día a día de la ciudad. Unos objetos que nos invitan a visitar las distintas facetas de la vida pompeyana y nos aproximan un poco más a la realidad del mundo romano y a la percepción que hemos construido del mismo." [Rubén Montoya]
Pero esta no fue la última destrucción que sufrió la ciudad de Pompeya, pues durante la Segunda Guerra Mundial fue bombardeada en dos fases. El primer bombardeo llevado a cabo por las fuerzas aliadas fue la noche del 24 al 25 de agosto de 1943. El segundo bombardeo, que se produjo unos días después, entre el 13 y el 26 de septiembre, fue el más agresivo. En total cayeron más de 170 bombas sobre Pompeya. Los daños fueron irreparables y afectaron a numerosos edificios
Fue precisamente el redescubrimiento de Herculano en 1738 por parte del del ingeniero aragonés Roque Joaquín de Alcubierre, a partir de algunas evidencias previas, lo que inició las excavaciones en la vecina Pompeya, y que contaron con el entusiasmado apoyo y la financiación del rey Carlos VII de Nápoles (futuro Carlos III de España). Cubierta por cenizas y lapilli, los trabajos resultaron más fáciles en Pompeya y desde 1748 se desenterró, poco a poco, los restos de la ciudad romana que ha impactado a millones de personas que la visitan cada año.
La arqueología, como disciplina, aún estaba en pañales, y la posibilidad que ofrecía Pompeya de excavar una ciudad romana en su totalidad supuso la base sobre la que se desarrolló la arqueología clásica como ciencia. Hasta entonces, historiadores del arte, eruditos y anticuarios habían centrado su atención en el valor estético de algunas producciones antiguas. No resulta difícil imaginar la revolución que supuso poder experimentar una ciudad romana a través de casi todos los sentidos cuando, hasta entonces, las únicas estructuras que se conocían eran las ruinas que habían desafiado al tiempo, principalmente en la ciudad de Roma y en sus alrededores. Con el objetivo de consolidar lo descubierto hasta entonces, más allá de los objetos, pronto comenzaron a protegerse pinturas y casas in situ.
"Nuestra historia de grandes descubrimientos comenzó a mostrar su lado oscuro de manera acuciante: el turismo y la erosión antrópica, constante desde 1748, habían afectado de manera irreparable al milagro arqueológico que con tanto esfuerzo se había conseguido desenterrar."
Este yacimiento arqueológico ha fascinado a eruditos, anticuarios, investigadores y turistas, y han sido innumerables las obras literarias que han alimentado la curiosidad de un público fascinado por la historia y el mito de esta ciudad romana. Ahora, de la mano de Rubén Montoya, cuya investigación combina el trabajo en los archivos de Roma con las visitas in situ al yacimiento y a los depósitos arqueológicos donde se custodian los millones de objetos recuperados de las excavaciones, podemos asistir desde primera fila a la historia de esta ciudad legendaria desde su fundación a finales del siglo VII a.C. hasta las recientes excavaciones que se están llevando a cabo. Aprenderemos sobre su historia a través de 100 objetos que retratan cada rincón de esta ciudad, desde los espacios públicos hasta el interior de sus casas; que nos trasladan a las dinámicas económicas y culturales de la zona; que hablan de su organización urbana y de su intensa actividad política; que explican la variedad de los cultos religiosos de la época; que cuentan cómo eran los entretenimientos y los placeres de la vida romana; y que, finalmente, nos muestra la esfera funeraria en esa sociedad antigua.
El libro está repleto, como podéis imaginar de detalles y de anécdotas y aquí resalto una que me llamó la atención. Durante los veinticinco años que Carlos había sido rey de Nápoles se había producido una auténtica revolución cultural [...]. Él fue quien inició las excavaciones sistemáticas de las míticas ciudades romanas sepultadas por el Vesubio más de mil años atrás, ganándose el título de " rey arqueólogo".
Dentro de los 100 objetos que Rubén Montoya ha seleccionado para este libro, hay dos de especial interés. Uno es un ánfora de cristal que contiene aceite de oliva producido, probablemente, en la propia Pompeya.
El otro es uno de los objetos que más han llamado la atención desde su descubrimiento es el instrumental médico hallado en una de las casas cercanas a la Puerta de Herculano. Tal fue el impacto del descubrimiento que la casa fue inmediatamente asociada a un doctor, y ha pasado a ser conocida como la Casa del Cirujano [...]. Se trata de un equipo instrumental que guarda una similitud única con los actuales: desde fórceps y pequeñas cuchillas a modo de bisturí, hasta catéteres, dilatadores anales, pinzas quirúrgicas y espátulas.
100 imágenes sobre la vida y la muerte de una ciudad romana única. A través de cada objeto, este libro profusamente ilustrado, invita a un viaje de redescubrimiento de una Pompeya escondida a ojos de cualquier turista que pueda pasear entre los miles de edificios vacíos que, aun en ruinas, sobreviven al tiempo.
Lee y disfruta de las primeras páginas del libro.
El autor:
Rubén Montoya González es doctor en Arqueología Romana por la Universidad de Leicester. Allí trabajó desde 2016 como investigador del Arts and Humanities Research Council de Reino Unido. En la misma universidad obtuvo su máster en estudios del Mediterráneo Clásico en 2015 y, con anterioridad, desarrolló sus estudios de grado en Historia en la Universidad Complutense de Madrid. A lo largo de su vida académica ha estudiado Arqueología Clásica en la Universidad La Sapienza de Roma (2012-2013) y ha sido investigador en la Escuela Española de Historia y Arqueología de Roma. En la actualidad desarrolla un proyecto de investigación sobre Pompeya y otros yacimientos arqueológicos del área vesubiana en el Real Instituto Neerlandés de Roma.
El libro:
Pompeya. Una ciudad romana en 100 objetos ha sido publicado por la Editorial Crítica en su Colección Tiempo de Historia. Encuadernado en tapa dura con sobrecubierta, tiene 632 páginas.
Como complemento pongo un vídeo en el que Rubén Montoya nos habla de su libro Pompeya. Una ciudad romana en 100 objetos.