Pon algas en tu dieta

Por Celiaganzano @Cocinista

Las algas son un ingrediente que poco a poco se ha convertido en un bien apreciado en la gastronomía moderna. Son sanas, nutritivas y versátiles, por lo que se han integrado en muchas dietas tanto asiáticas como occidentales. Hoy os presentamos tres algas distintas que podéis usar en vuestras recetas.

Alga hijiki

Alga hijiki

" data-orig-size="800,532" sizes="(max-width: 300px) 100vw, 300px" aperture="aperture" />Es un alga de origen asiático que llegará hasta nuestra cocina en forma deshidratada. Por eso, para poder introducirla en nuestras creaciones, sobre todo en sopas y ensaladas, tendremos que rehidratarla. Para ello o bien la mojamos en agua fría o bien la calentamos en un cuenco para darle un hervor. Es una alga con bastante sabor y su gusto suele recordar al mar, por eso es mejor ponerla un poco en agua caliente para que no sea tan intensa. Como ya hemos comentado, una idea es servirla en ensalada, otra puede ser integrarla en una sopa miso.

Alga Arame

Alga arame

" data-orig-size="800,533" sizes="(max-width: 300px) 100vw, 300px" aperture="aperture" />También procede de Asia, más concretamente de Japón. Es un alga tipo kelp, de sabor suave y más carnosa que otro tipo de algas como la wakame. Es ideal para aquellos que no estén acostumbrados a comer algas, ya que es suave y su sabor es fácil de asimilar. Lo más normal es que la encontremos deshidratada, por lo que, al igual que la anterior, habrá que rehidratarla para poder consumirla. Os aconsejamos que la metáis en agua tibia durante unos 15 minutos. La arame se consume sobre todo en platos calientes y se mezcla con otros ingredientes como el aceite de sésamo y las semillas de sésamo ya que combina bien. Es rica en alginato, por lo que también tiene utilidad como espesante culinario.

Wakame

Wakame

" data-orig-size="801,536" sizes="(max-width: 300px) 100vw, 300px" aperture="aperture" />Esta es el alga más conocida en la actualidad. Se usa en ensaladas, platos salados y sopas. Proviene de Asia, donde es muy popylar en países como China y Japón, pero su ingesta se ha extendido tanto que ya se cultiva en los cinco continentes. Al igual que las anteriores lo más probable es que la encontremos deshidratada (aunque hay lugares donde se puede comprar fresca). Tras le proceso de rehidratación, se convierte en un ingrediente flexible. Tiene un fuerte sabor a mar, pero su gusto depende también de su variedad, ya que existen varias y las hay más suaves y adaptables a los gustos más clásicos. Una receta donde podéis usarla es en la famosa ensalada wakame, que además es muy fresquita para verano.