Pon un sonrisa de niño en tu vida

Por Pilarta
El domingo, tuve una pequeña discusión con mi marido, en la calle, cuando ya saliamos para coger el autobús. De repente, Lola, empezó a bailar, a mover su cabeza de un lado a otro, a levantar los brazos y mover sus manitas tipo jota o tipo sevillana, según se mire y entonces, mi marido y yo nos abrazamos y dejamos de discutir.
No sé si es que antes no lo veía o no me fijaba, pero Lola es una sonrisa andante y allá donde vamos consigue trasmitir su alegría.
Y es que si os fijáis por la calle, la gente va mirando el suelo, triste, pesarosos, pues Lola consigue que incluso el más serio saque una sonrisa. Lola saluda a todo el mundo por la calle, a los que van en las motos, a los peatones, a la gente mayor, a otras madres, a la gente serie, a la gente sonriente y Lola lo consigue. Consigue que el más serio de todos, sonría y la salude.Me encanta ir con ella por la calle, porque es como si a su alrededor todo se volviera de colorines,la gente dejara de ser gris y yo también.
También los hijos, como en mi caso, Lola me ha dado muchos quebraderos de cabeza, más que nada preocupaciones, como cuando se pone malita o como cuando llega la hora de la comida y no prueba bocado o cuando se enfada porque quiere algo que no puede tener. Pero esos momentos son contrarrestrados con los que ella sonrie y se siente contenta y me lo trasmite.

Fijaros en las sonrisas de vuestros hijos, o si los que me estáis leyendo y no tenéis hijos, iros a un parque y saldréis contentos, las sonrisas de los niños son bálsamicas, reparadoras y energizantes, así que no debéis perder la oportunidad de disfrutarlas.