Tomemos a toda esa gente que quiere ver bien lejos Micky Vainilla.
Para ellos la tele es maravillosa.
Frente a la injusticia cotidiana y los miles de tipos corruptos que “se salvan” mediante el simple cohecho, el sobre salvador de fin de mes, la complicidad pequeña que un día nos permite “la casita”, ahí corrije la tele, único sitio donde podemos ver que invariablemente el Bien siempre triunfa sobre el Mal y que el delito no paga, gran corrector simbólico de injusticias donde nosotros los Nadies siempre somos protagonistas.
Donde la mucama deja de ser “la sierva” para transformarse mágicamente en la novia amada de un chico lindo, unchico bien, de esos con fortuna y llenos de buenas intenciones.
Dicho lo cual: Pido seriamente que me envíen al mundo de la televisión, pido desesperadamente que me dejen estar cerca de tanto rico bueno, al lado de los justicieros...
Yo también quiero llenar mis carencias con ese néctar que se fabrica en los sets de las películas para que las miren los sonsos, porque señores,
Yo también soy un sonso.