Como ya conté en este post, estoy en una fase de Zenismo, intentando poner orden en casa y, por tanto, también en mi vida.
No os voy a descubrir ningún mundo nuevo, pero estoy tan orgullosa de mis cambios, que necesito hacerlo público y, si de paso, puedo ayudar a alguien que esté también en proceso de limpieza, pues mejor que mejor.
Este estado de orden me ha costado bastante llevarlo a cabo, pues conlleva una serie de cambios en los hábitos diarios, cambios, en principio, pequeños, pero con grandes resultados.
Y ¿cuáles son estos resultados? Tener la casa en orden y limpia y, que apenas me cueste conseguirlo. No me he vuelto ninguna maniática de la limpieza y el orden, ni mucho menos, pero ahora pierdo menos tiempo en limpiar, y siento que llevo la vida más organizada.
Descubramos las reglas básicas :
- Recoger todos los días : Dejar cada cosa en su sitio y recoger los trastos (y juguetes) cada día. De esta manera, además de tenerlo todo ordenado con facilidad, nos resultará más sencillo a la hora de limpiar.
- Cada prenda en su lugar : dejar la ropa sucia en la cesta y la limpia en el armario. Evitaremos hacer montañas de ropa esperando a ser guardada en el armario.
- Limpiar los platos después de cada comida: Aunque a veces da mucha pereza, cuando has terminado de hacerlo, te llena de satisfacción ver la cocina limpia y saber que no tendrás que limpiar platos viejos más adelante.
- Limpieza cada dos días : Como tendremos todo recogido y en su sitio, apenas nos costará pasar la escoba y la fregona por toda la casa y limpiar el baño rápidamente. Como la cocina también la tendremos casi limpia, no nos costará nada.
- Limpieza semanal : Una vez a la semana haremos una limpieza más exhaustiva, como quitar el polvo, por ejemplo.
- Limpieza general estacional : con la llegada de una nueva estación, aprovecharemos para hacer una limpieza general, limpiar aquellos rincones e interiores de armarios que normalmente no limpiamos.
- Lavadoras : Esta regla dependerá del caso de cada uno, pero debido a la situación de mi lavadora (no la tengo muy a mano), me he propuesto hacer las lavadoras el fin de semana, es verdad que a veces se me juntan tres lavadoras, pero así me resulta mucho más cómodo. En esas lavadoras, no puede faltar una con las sábanas, las toallas y los pijamas.
- Ordenar las cosas con cabeza : De nada sirve colocar en lugares inaccesibles, los productos que usamos con frecuencia, pues así conseguiremos dejarlos en cualquier lado. Así que las cosas que más se utilizan, las guardaremos en lugares de fácil acceso, para tenerlos a mano y poder dejarlos en su lugar cuando ya no se utilicen.
- Evitar tener demasiadas cosas: Si de algo me he dado cuenta es de la cantidad de trastos que se acumulan, la mayoría de ellos, totalmente innecesarios. Si conseguimos tener la mente fría, podremos deshacernos de aquellos que realmente no sirven para nada y que solo ocupan un espacio muy necesario.
- Planning de comidas : Todavía estoy en proceso de hacer mi planning perfecto y detallado, pero mientras tanto, he conseguido organizarme para no pelearme conmigo misma todos los días pensando en lo que cocinar. Tengo preparado para cada día de la semana el tipo de comida que comeremos (carne, pescado, etc.), así voy directa al grano. De momento sigo improvisando los platos, pero al menos ya tengo una gran parte ganada.
Pues como habéis visto, estos sencillos pasos no son nada del otro mundo, pero me ha costado tiempo y comeduras de cabeza llegar hasta aquí.
Ahora tengo mucho más tiempo para hacer otras cosas y disfrutar del tiempo libre, del real, tiempo libre para jugar con mi hijo o dedicarme a mis hobbies varios, en vez de estar recogiendo o limpiando horas y horas.
“No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”.