por dinero o por amor

Por Aceituno

Pues sí, más flores. En este caso las elijo porque son raras, extrañas, diferentes… Es lo que tiene la primavera, que ofrece mucho color y es difícil resistirse a fotografiarlo. Hoy tenía pensado no publicar nada por aquello de que es el día del trabajo, pero luego he pensado que no quiero tomarme este blog como un trabajo, así que me he decidido a escribir algo.

Yo he trabajado poco en la vida, la verdad. Poco pero en un montón de cosas distintas: actor de doblaje, músico en obras de teatro, cantante, guía turístico, camarero de restaurante, camarero de hoteles de lujo, actor de teatro, actor de televisión, comercial de inmobiliaria, payaso en comuniones, fotógrafo… y creo que nada más, aunque es posible que olvide algo. Todos esos trabajos tenían algo el común: que me pagaban por hacerlo. Digo esto porque he aprendido que, en rigor, uno solo debe hacer las cosas por dos motivos: por dinero o por amor. Nada más. La vida es demasiado corta como para dedicar tiempo a algo que no te apasione o por lo que no te paguen. Tal vez suene radical, pero os aseguro que cuando ves el poco tiempo que tienes por delante valoras muchísimo más en qué lo gastas y en qué lo has gastado.

Yo sé que no me voy a morir mañana, no quiero pecar de ser demasiado tristón o dramático, pero también sé que no llegaré a viejo. Antes no lo sabía y recuerdo que solía pensar que tendría tiempo para todo, así que iba postergando algunas cosas. Eso se acabó y me entristece profundamente cada minuto que no dediqué a hacer algo que me apasionase, que me gustase de verdad. Son tantas las horas muertas que uno dedica a estupideces…

En fin, lo repito una vez más: por amor o por dinero. Feliz día del trabajo a todos.