Benetint has become a staple in every celebrity and make up lover's beauty bag, so now it's at last in my hands I wanna tell you why I'm loving it so (soooooo) much.
Para quien no lo conozca, Benetint es un tinte líquido que se presenta en un bote de cristal que lleva incorporado un pincelito en la tapa (como los esmaltes de uñas). Con unas gotas en las mejillas, se extiende con los dedos o una brocha rápidamente y deja un tono muy saludable y natural a modo de colorete. Además, puede usarse también en los labios, dando un aspecto de "labio mordido".
Lo mejor de este producto, además de lo natural que queda, es que deja un ligero brillo súper favorecedor y natural. No es que lleve purpurina, sino que la piel se queda con aspecto muy sano, como cuando la exfoliamos y tiene ese brillo de piel bonita. Por otro lado, el tono que deja es como si nos ruborizáramos.
Además, dura muchísimo. No sólo en la piel, pues he comprobado que bastantes horas después de habérmelo puesto seguía en su sitio (cosa que no me había pasado con ningún otro colorete, ni en crema ni en polvo), sino en el bote. Un par de gotas son suficientes para cada mejilla, así que calculo que me va a durar más de un año.
El tono que yo he comprado es el original, un rosa fuerte que en la piel queda suave y natural, pero hay más tonos como el melocotón del Posietint o el rosa más clarito de LolliTint que estoy deseando probar.
Su precio es de 34,90€ en Sephora (con lo que cunde y lo bueno que es, me parece que está bien), pero es que ahora tenéis una cajita de Navidad por 39,95€ en la que viene este producto, la máscara de pestañas They're Real (de la que os hablaré en breve y que también me tiene loca), una muestra de The Porefessional y una muestra de uno de sus perfumes. Me parece un regalo (o autoregalo, que es lo que yo me he hecho) perfecto para estas Navidades, ¿verdad?
La verdad es que llevaba mucho tiempo queriendo probar los productos de Benefit, y estoy segura de que este no será el último que llegue a mis manos. Atentas a este blog, que os seguiré contando...