Título original: Enfin veuve
Directora: Isabelle Mergault
Guionistas: Isabelle Mergault
Jean-Pierre Hasson
Intérpretes: Michèle Laroque
Jacques Gamblin
Wladimir Yordanoff
Tom Morton
Valérie Mairesse
Claire Nadeau
Eva Darlan
Productor: Jean-Louis Livi
Fotografía: Philippe Pavans de Ceccatty
Música: Laurent Marimbert
Étienne Perruchon
Montaje: Véronique Parnet
Nacionalidad: Francia
Año: 2.007
Duración: 93 minutos
Edad: 13 años
Género: Comedia, Drama
Distribuidora: Notro Films, S. L.
Estreno: 22-08-2.008
DVD Alquiler: 03-12-2.008
DVD Venta: 11-03-2.009
Página WEB: Ficha completa en IMDb
Web Oficial de la película en España
Web Oficial de la distribuidora en España
Tráiler de la película en YouTube
Calificación:
Crítica: 4,985 Espectadores: 90.623
Vizcaya: 5,156 Recaudación: 524.565,04 €
España: 3,758 Puntos (Popularidad):
Rugoleor: 4,379 Ratio de popularidad:
Sinopsis:
Anne-Marie acaba de perder a su marido en un accidente de tráfico. ¡Por fin es libre de amar a la persona a la que lleva dos años viendo en secreto! Pero Anne-Marie no contaba con que su familia, con toda su buena intención, ha decidido permanecer a su lado para apoyarla en su dolor. Anne-Marie se encuentra aún más prisionera que cuando estaba casada...
El mito de la viuda alegre revisitado a lo tonto por Isabelle Mergault, actriz que debutó como realizadora con “Eres muy guapo (2.005)”. Una adinerada mujer (Michèle Laroque) piensa en fugarse con su humilde amante, pero su marido fallece en un accidente. Por desgracia, en tanto que viuda presuntamente desconsolada, su familia decidirá no dejarla ni a sol ni a sombra. Por no atreverse a reconocer sus auténticos sentimientos, se encontrará atrapada de nuevo.
Crítica:
29.08.2008 – ANTON MERIKAETXEBARRIA
Una viuda desenfrenada
El muerto al hoyo y el vivo al bollo es un dicho popular que tiene grandes visos de ser cierto. Si no, que se lo pregunten a Anne-Marie, la protagonista de “Por fin viuda”, una mujer ya madura, libre de ataduras matrimoniales, cuando su marido fallece de forma repentina. Dispuesta a disfrutar de su amante, con el que mantiene relaciones secretas desde hace tiempo, tendrá que perfeccionar el arte del disimulo cuando su familia y amigos se empeñen en consolarla. Tragicómica premisa argumental, en la segunda realización de la cineasta gala Isabelle Mergault (“Eres muy guapo, 2.005)”, que de algún modo desprende cierta burlona comicidad por medio de unas imágenes zumbonas, pero sin la imprescindible imaginación.
Mujer invisible busca hombre transparente para hacer lo nunca visto, podría ser el lema de esta viuda desenfrenada, encarnada con abundante sorna por Michèle Laroque, en contraste con el resto de los entrometidos personajes, empeñados en aguarle la fiesta a nuestra dicharachera protagonista. Por eso, el qué dirán y la hipocresía social están muy presentes en el título que nos ocupa, donde la viudedad se nos presenta como algo divertido, en contraste con lo políticamente correcto.
El humor es una de las cosas más amenas de la vida, pero cuesta muchos años de aprendizaje. Es precisamente lo que le falta a la autora de “Por fin viuda”, conforme la película va perdiendo fuelle según avanza en su previsible desarrollo, festivo en ocasiones, pesado en otras, con lo cual el resultado final se queda en agua de borrajas. Hubiera hecho falta la sutil ironía de un Ernst Lubitsch o el malévolo sentido del humor de un Oscar Wilde para hacer que este simpático enredo superase la mera discreción. Eso sí, lo que su máxima responsable deja muy claro en casos como el presente es lo sumamente difícil que resulta engañar a la familia.