¿Por qué 1 de cada 4 usuarios elimina una app después del primer uso y cómo evitarlo?

Publicado el 17 enero 2017 por Miyo @miyocomunica

Seguramente al leer al leer el título ya te ha venido a la mente alguna experiencia personal en la que, efectivamente, eliminaras o abandonaras una app tras su primer uso. Seguramente, si la decepción fue muy grande, hasta recuerdas la app y el motivo concreto.

La conducta es innegable pero… ¿por qué ocurre así?

La mayoría de las marcas quisieron subirse demasiado rápido al carro de las apps y se olvidaron de la experiencia de usuario y la generación de valor.

En este contexto, el motivo concreto para que el usuario abandone puede ser cualquiera:

  • Que nada más abrir la aplicación, se pida una valoración o estrellas. “¡Si todavía no sé ni como funciona, ¿cómo voy a saber si me gusta?” ¿Os suena?

Esto, en gran medida está motivado porque la marca piensa en atraer nuevos clientes, para lo que requiere muchas valoraciones. Se olvida de pensar primero en los que ya la han descargado y su experiencia.

  • Que la aplicación no aporte nada nuevo. Una aplicación no es un escaparate de los productos o servicios de la marca. Y el usuario lo sabe. ¿Cuál es el objetivo de tu aplicación, además de vender? ¿Qué ventaja le vas a ofrecer al usuario?
  •  Que sí aporte valor pero sea poco funcional, es decir, imposible de usar. 

¿Cómo se soluciona? 2 simples pasos:

  1. El más dificil:

¿Cuál es el objetivo de tu app?

¿Y por qué es el más dificil? Porque si el objetivo no está claro o si no aporta ningún tipo de valor al usuario, más vale no tener una app que solo dañaría la imagen de marca.

¿Conoces a tu usuario? Dale lo que quiere. Premialo. Motívalo. Y sobre todo, ayúdalo. Incluso si es a buscar a tu competencia.

2. El más caro: 

Experiencia de usuario / UX

Vale, tienes el objetivo claro. Ahora, invierte en la experiencia del usuario de tu app. Por muy buena que sea tu app, si no sabe cómo utilizarla, no la utilizará.

No hagas un app a la ligera con un programa gratuito y una plantilla que nada tiene que ver con tu negocio. Contrata una agencia especializada, un desarrollador… lo que haga falta.

Testea la aplicación. Busca fallos, corrígelos.

¿Estás seguro de que ya es perfecta? ¡Genial!

Ah, se me olvidó un paso:

Promociona tu app

Si no la conocen, ¿cómo la van a descargar?

Y mejor todavía:

Premia su descarga

¿Un descuento por descargarla? ¿Una sesión gratis? ¡Dale al coco!

Veamos un ejemplo simple de mi propia experiencia:

OhMyCut! Y su app OhApp!

Este salón de estética y peluquería tiene una app que cumple una función principal y muy importante: Dar turnos a sus clientes.

El salón no funciona a través de citas, como la mayoría, si no que en cualquier momento, pides un turno, te dan un número, te avisan cuando queda poco tiempo y acudes.

Y la app es el único lugar donde puedes pedir turno sin estar físicamente en el salón.

Con ello, puedes pedir turno en cualquier lugar y momento, mientras tomas un café.

Y todo esto sería el paso 1; no es una app que muestra sus servicios, por ejemplo, y ya está. Si no que le han dado una función que no puedes hacer en ningún otro sitio, haciéndola indispensable. Incluso arriesgado y diferente.

En cuanto al paso 2: la funcionalidad o experiencia; es muy fácil de usar. Solo eliges el salón y le das a solicitar turno.

Lo que yo le añadiría, que considero que falta, es algo como “Estado de tu turno” en tiempo real:

Quedan 10 minutos aproximadamente, Acude ahora, Se te ha pasado: Pídelo otra vez, etc. Ya que una vez lo pides, no puedes ver qué está pasando hasta que te avisa de acudir, si lo solicitas.

¿Y ahora, cómo vas ha plantear tu app?

¿Te ha gustado este post? ¿Tienes alguna sugerencia?