Revista Cultura y Ocio

"Por qué amamos a los perros, nos comemos a los cerdos y nos vestimos con las vacas" (Melanie Joy)

Por Tesnehuen

"La cuestión no es si tienen capacidad de raciocinio o de lenguaje, sino si tienen capacidad de sufrimiento" (J. Bentham) 
Siempre he admirado a Bentham. Creo que nadie como él supo entender tan a tiempo la realidad y las injusticias a las que eran expuestos los animales. Pese a ello, sus palabras pasaron volando, como lo hacen las cosas sin importancia.

Vivimos cada vez de forma más hiperactiva. Nuestra valía ya no se construye en base a la calidad de las cosas que desarrollamos sino a nuestra capacidad de producción. Y en esa vida atropellada y ridícula carecemos de tiempo para detenernos a pensar en las cosas que consideramos menos importantes: como lo es nuestra alimentación. Pero si supiéramos lo ligados que se encuentran nuestros hábitos a nuestros principios y, sobre todo, a nuestras emociones, posiblemente sí frenaríamos y decidiríamos.

Decimos que hacemos lo que queremos, que nos alimentamos de la forma que escogemos, pero lo que en realidad ocurre es la puesta en marcha de una serie de mecanismos que nos han sido impuestos de forma sutil. Y es que cuando una ideología invisible (la carnista, en este caso) guía nuestras creencias y conducta, todos los que caen en esa vorágine (aquí entramos nosotros) se convierten en víctimas de un sistema que se basa en la usurpación de la libertad individual para construir un sistema rutinario y autómata. 

La Editorial Plaza y Valdés ha publicado “Por qué amamos a los perros, nos comemos a los cerdos y nos vestimos con las vacas”, de Melanie Joy.Un ensayo en el que la psicóloga norteamericana nos presenta las causas y las consecuencias de una vida construida en base al sufrimiento de los animales no humanos.
No se trata de un libro con objetivos dogmáticos, sino más bien filosóficos (en el sentido más amplio de esta palabra). Se encuentra lleno de preguntas acerca de nuestra forma de actuar y tratar a los animales. Es una obra que nos obliga a detenernos para tomar partido en torno al futuro que estamos construyendo.
¡Les recomiendo que no se la pierdan!
En Poemas del Alma he escrito una reseña detallada sobre esta obra. Los invito a leerla en este enlace.



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