NO SON CASOS EXCEPCIONALES. A MUCHAS LES PASÓ. LO VIMOS, ADVERTIMOS QUE TENÍA UN ANILLO PERO IGUAL NOS INTERESÓ. O, AL MENOS, NO LO ESQUIVAMOS. Y NI BIEN SURGIÓ LA OPORTUNIDAD INICIAMOS UNA RELACIÓN, AÚN SABIENDO QUE EL SEÑOR EN CUESTIÓN TENÍA ESPOSA.
¿QUÉ NOS LLEVA A SOSTENER Y ELEGIR ESTE TIPO DE RELACIONES?
¿NOS GUSTA SUFRIR O SIMPLEMENTE NO ESTAMOS LISTAS PARA UN COMPROMISO SERIO? LAS PREGUNTAS SON MUCHAS; LAS RESPUESTAS, TAMBIÉN. CON IRONÍA, LA PSICÓLOGA Y SEXÓLOGA ADRIANA ARIAS INVITA A LA REFLEXIÓN.
-Porque hacen y tienen lo que querríamos para nosotras: una esposa, una casa, un trabajo, una familia.
-Porque nos encanta pensarnos destruyendo esa estructura para repetirla ipso facto pero con nosotras.
-Porque estamos convencidas de que lo único que le pasa al casado es que se equivocó de señora.
-Porque no hay nada más atractivo que descasar a un casado y hacerlo nuestro.
-Porque es un trámite más rápido en nuestro objetivo "varón candidato a marido".
-Porque un tipo que fue marido y padre durante tanto tiempo debe ser un buen tipo.
-Porque queremos que finalmente sea feliz y no sufra más soportando a esa bruja.
-Porque tiene todas las condiciones y recursos y no los disfruta.
-Porque no hay mejor amante que un casado que resuelve sus históricas y eternas frustraciones sexuales con nosotras.
-Porque encontrarnos con él es lo que más se parece a ver a un chico en el circo, tan feliz, tan agradecido.
-Porque nos permite jugar a la victima sin reparos, nos deja, nos quedamos solas, nos bancamos su ausencia, nos las arreglamos como podemos, los fines de semana lloramos por él y gozamos imaginando su culpa por abandonarnos.
-Porque somos tan buena gente que no le hacemos quilombo en su vida y el bien sabe que si querríamos podríamos.
-Porque nos da tiempo a ponernos espléndidas en cada encuentro (bañadas, depiladas y perfumadas) y no como ella que siempre tiene olor a ajo.
-Porque somos el amor de su vida... qué duda cabe.
-Porque se nos perdona todo, y todo es mucho, dado el sacrificio que padecemos por no poder él estar a nuestra altura.
-Porque tenemos otorgados todos los derechos de engañarlo si se nos antojara.
-Porque es fantástico acompañarlo y sostenerlo en sus tantos problemas pero no tenemos que ocuparnos de ninguno.
-Porque somos tan dadoras.
-Porque no tenemos que pagar por nada y... De nada, faltaba más.