Por qué hidratarse es necesario para los ciclistas

Por Rafael @merkabici

Hidratarse es fundamental, pero los profesionales no lo tienen tan fácil. Recuerda nuestro experto de cabecera, Chema Arguedas, por qué los pros no pueden hidratarse como ellos quisieran: “En el ciclismo profesional no está permitido comenzar con el avituallamiento líquido desde los coches de equipo, hasta que no se llevan cincuenta kilómetros de etapa. Salvo que debido a unas condiciones ambientales excesivamente calurosas, decidan los comisarios que pueden comenzar antes”.

¿Imprimir mayor dureza al ciclismo a base de no hidratarse y hacérselas pasar más canutas? Puede ser, excepto, como recordaba Arguedas, en aquellas jornadas en las que se levanta la veda, ya que suelen ser jornadas donde las altas temperaturas son las protagonistas. “Es cuando vemos a los gregarios dejarse caer hasta el coche y coger un buen número de bidones para hacérselos llegar a sus compañeros”

Hidratarse está permitido en todos los demás ámbitos, incluidas pruebas semi-profesionales. Siempre podremos hacerlo en tanto seamos cicloturistas. Nosotros podemos beber cuando nos plazca “y sin embargo, no son pocos los que llevan un par de horas en ruta y aún llevan agua o bebida isotónica en los bidones”, lamenta Arguedas.

¿Por qué lo lamenta? Porque la gente no sigue al pie de la letra los consejos, como por ejemplo las bondades de hidratarse y los peligros en caso contrario. Como explica Arguedas, si hablamos de simples salidas con otros compañeros o de entrenamientos sin más, y especialmente los días de frío, muchísimos aficionados vuelven a casa con los bidones que llevaban al salir, y eso es un error garrafal. “Es más, de los dos portabidones, uno de ellos suele estar ocupado por una bolsita con alguna cámara de repuesto y herramientas”. Bravo.

Esto indica que no le damos la importancia que merece al llevar una correcta hidratación. Hidratarse es bueno, y no hidratarse es nocivo. Es verdad que la rumorología ha alcanzado cotas insospechadas, y hay quien cree que por no hidratarse nos saldrán calambres. Es falso, pero ahí van algunas consecuencias reales:

Si sudas no pierdes grasa sino que, además de electrolitos, pierdes agua. Y hay que recuperarla.

El agua forma parte del plasma sanguíneo. Al sudar, se espesa la sangre y aumentan las pulsaciones. Resultado, menos eficiencia por no hidratarse.

Si pierdes un 1% de agua ya tienes sed; con un 3% ya se pierde rendimiento y riesgo de contracturas y calambres. Hay que hidratarse.

El agua es necesaria para asimilar todos los carbohidratos que ingieras. Si no bebes, la extraerá del organismo y te deshidratarás.

El agua interviene en todas la reacciones químicas del organismo y regula la temperatura corporal.