¿Por qué y cómo cambian de piel estos reptiles?... Las serpientes cambian de piel por dos motivos principalmente:
- En primer lugar para poder crecer, ya que la piel de la serpiente no crece al ritmo que crece el resto de su cuerpo. La piel humana pierde millones de células a nivel microscópico cada año, las serpientes en cambio, no pueden hacer este cambio microscópico y por ello tienen que cambiar por completo de piel frecuentemente. La frecuencia depende del punto del ciclo vital en el que se encuentre la serpiente; mudan mucho más veces durante la infancia y la adolescencia (algunas especies lo hacen cada dos meses). El ritmo disminuye con la edad, los adultos cambian de piel solamente unas dos veces al año.
- El segundo motivo para el cambio de piel de las serpientes tiene que ver con la salud. La falta de humedad, falta de vegetación, exceso de calor, etc., así como una inadecuada alimentación pueden hacer muchas veces que la piel se deteriore o que aparezcan parásitos. Esto podría ser muy dañino para la serpiente, por eso el cambiar de piel evita problemas y empieza de cero.
Curiosamente el proceso de cambio de piel también tiene sus complicaciones. Durante una o dos semanas antes de mudar la serpiente deja ver como la piel externa se afloja, y también durante una o dos semanas después de mudar la piel, esta se encuentra blanda, por lo que la serpiente es bastante más vulnerable a los ataques de depredadores. Por esta razón las serpientes suelen ser muy cuidadosas cuando están cambiando de piel, intentan, en la medida de lo posible, permanecer inactivas.
Proceso de cambio o muda de piel en las serpientes
Cuando una serpiente se prepara para mudar o cambiar su piel, un líquido lechoso es segregado bajo la capa exterior de la piel con el objeto de desligarla de la nueva piel formada por debajo. Así mismo, esta capa lechosa le da un color grisáceo a los ojos de la serpiente.Para empezar a mudar la piel, la serpiente frota su cuerpo o cabeza contra algo duro o cortante para así poder quebrar la piel vieja. Empleando sus músculos, la serpiente estira la piel exterior y comienza a librarse de ella. La serpiente también puede ayudarse a abandonar la antigua piel enrollándose alrededor de objetos como troncos, ramas, y piedras. Eventualmente la piel exterior es dejada atrás, generalmente en una pieza y al revés. La nueva piel es brillante y los colores y figuras se manifiestan más brillantes que antes.