Este es un artículo de autor invitado: Laura Ribas
Podría venirte con trillados consejos. Soltarte listados y enunciados tipo “5 maneras de” o “10 errores que”.
Podría ser complaciente y decirte que vas bien, que sólo tienes que ser constante, que mejores en tus llamadas a la acción o que afines los titulares porque son la clave de la conversión de tus lectores.
Pero esa no es la verdad. O al menos, no es la completa verdad.
La realidad es que ahí fuera hay demasiado ruido y sobran las marcas y los blogs mediocres.
La verdad por la que tu blog pasa desapercibido es porque aburre.
Aburre porque quieres agradar a todo el mundo por miedo a ser criticado. Aburre porque estás más pendiente de lo que hace el blog vecino o el gurú de moda que de ahondar en tu propia marca y personalidad y dar con los rasgos diferenciales de tu mensaje.
Esto tenía que ser un post sobre copywriting pero…
Dándole vueltas al tema me di cuenta que de nada serviría que te contara los ingredientes y tempos de un un buen post o cómo estructurar una página de ventas si falta lo esencial: Tú.
Y cuando digo tú, también me refiero a tu empresa, tu blog o cualquiera que sea el proyecto que tengas entre manos.
Para ubicarnos te diré que el copywriting es el uso de textos, palabras y fórmulas estratégicamente diseñados para despertar una respuesta en el lector: que compre, que lea, que reserve una plaza, que comparta el contenido. You name it.
Pero más allá de las estructuras y fórmulas, con el tiempo me he dado cuenta que lo que realmente hace un texto algo excepcional son las emociones y la capacidad de conectar a un nivel muy empático con el clientes o lector.
El mejor copy es aquel donde el usuario se ve tan identificado que cada párrafo le engancha e incita a continuar sin saltarse una coma.
El mejor copy es aquel que va más allá de la información. Es el que inspira, conecta, entretiene y motiva. Es el que deja huella.
El mejor copy es aquel que lees y piensas “¡Este soy yo! ¡Me está hablando a mí! Sí, así me siento”
Y para eso hay que estar tremendamente abierto a la vulnerabilidad de quien te lee, tomar la mano de tu clientes/lector, coger aire y acompañarle a las profundidades de sus preocupaciones, temores, frustraciones y más secretos anhelos para luego subir a la superficie y ser capaz de hablarle a esos mismos miedos. Pero no desde la condescendencia, sino desde la empatía, el tú a tú. Quieres ser su confidente.
El copywriting es pura psicología aplicada.
Que tus textos no vendan y que tu marca sea mediocre van de la mano
Si tu marca, blog o presencia en las redes sociales pasa desapercibida es porque – señoras y señores – tu marca es del montón.
Yo también sufrí de este mal. Del temor a cometer un error no se libra nadie y este miedo nos homogeneiza y nos hace invisibles.
Sólo los que apuestan fuerte sus cartas, al todo o nada, terminan por construir una marca memorable.
Así que vamos a poner solución. ¿Quieres? Vamos a hacer de tu marca o blog algo memorable.
Para empezar… ¿dónde metiste tu personalidad?
Dime ¿Dónde la metiste? Porque tenerla, la tienes.
No es algo que se compra o adquiere. Es algo inherente en ti. Es tu esencia, tu estilo, tu voz.
Confundimos original con genuino. No se rata de ser lo que no eres, sino de tener el valor de ser tú mismo. Después de todo, intentar ser quien no eres es tremendamente cansino, ¿no crees?
¿Qué rasgos te caracterizan? ¿Eres pausado y grave? ¿Eres sarcástico y de humor fino? ¿O eres espontáneo e irreverente? No hay respuestas incorrectas.
No se trata que te pongas ahora ocurrente y gracioso cuando eso dista de tu forma de ser. Existen marcas y blogs con grandes personalidades pausadas y contenidas. Zen Habits, sin ir más lejos. Al final lo que quieres es atraer a aquellos que les gustas como eres.
Con tu permiso Víctor, te tomaré como ejemplo junto a tu bro Isra García.
Aunque los dos están en el mismo sector, ambos tienen personalidades y estilos muy distintos y eso se ve reflejado en su presencia online y textos.
Ambos son genuinos en su comunicación y ambos tienen éxito siendo ellos mismos y infusionando sus marcas con su personalidad.
También te diferencian cosas como tu historia y vagaje o tu causa y misión más allá del puro beneficio económico. Estoy hablando de tu gran “Por Qué”, concepto sobre el que habla Simon Sinek en su libro Start With Why o en su TED Talk.
En cualquier caso y llegues a la conclusión que llegues, ¡transmítelo! Se genuino. Se tú. No tengas miedo a la controversia o a las reacciones polarizadas. Si no les gusta lo que leen, que se vayan al blog de al lado, el del montón.
No permitas un blog/marca sin alma, no contribuyas al montón.
A partir de aquí tendrás las bases sentadas para desarrollar un copy que enganche y funcione.
Y para terminar… ¿Are you talking to me?
Porque eso es lo que me pregunto a menudo cuando topo con marcas y blogs genéricos… ¿A quién narices le estás hablando?
Todo esto no va sobre ti sino sobre ellos, sobre lo que consiguen y reciben al seguirte.
No cometas el error SSEM (Síndrome Salita de Espera de Médico) en un afán de querer impresionar. Ya sabes, el de colgar el listado de tus títulos, hitos y galardones.
Cuéntame en cambio en qué y cómo me ayudarás, por qué debería seguirte y qué tienes para mí. ¿Me vas a entretener? ¿Me vas a hacer pensar? ¿O me vas a inspirar?
Tu marca/blog perderá fuerza si pretendes llegar a todo el mundo. Decide quién es tu interlocutor ideal y dirígele tu mensaje. De este modo, lo que conseguirás es que cada vez más personas con ese mismo perfil se acercarán a ti.
Aunque no me iré sin darte una lista
Creo que lo más difícil es ser genuino y encontrar tu voz. Es una cuestión de entrenamiento y de constante evolución.
El resto son fórmulas, tácticas operacionales que se pueden aprender fácilmente. Aquí van unas cuantas que yo misma aplico y enseño.
- Habla siempre a tu cliente/lector ideal. Visualízalo sentado frente a ti mientras escribes un post, un email, un twit o una página de ventas. Imagínate tomando un café o una caña con él/ella mientras te cuenta sus historias y tu le aconsejas como amigo.
- Lee tus textos en voz alta. ¿Le hablarías así a alguien? Si no, dales un vuelta porque lo más probable es que no funcionen.
- Cuida la estructura y la composición. Usa puntos, destacados y texto formateado para jerarquizar la información y dirigir la atención hacia lo que te interesa.
- Ten siempre en cuenta la sintaxis del marketing: con quién trabajo -> qué problemas tienen -> Qué resultados aporto. Siempre en este orden si quieres que te hagan caso.
- Usa la prueba social. Es lo que más vende y convence.
- Averigua sus puntos de dolor y haz hincapié en ellos para luego presentar tu servicio como la solución a sus problemas.
- En última instancia, la gente sólo quiere: amor, salud, belleza, sexo, dinero, tiempo, seguridad, estatus y bienestar. Relaciona tu mensaje o producto con alguno de estos motivadores.
- Sé osado con tu promesa (propuesta de valor). Si no crees que tu servicio/producto es la bomba, ¿para qué lo vendes?
- Añade el factor urgencia y escasez para incentivar la compra. Somos procastinadores natos.
Sin embargo, recuerda, de nada te servirán estos consejos si no eres auténtico y muestras tu personalidad. ¡Sal del armario!
Tú tienes un mensaje. Y si no lo tienes, búscalo. Conecta tu blog a una causa que trascienda el mero blog. ¿Para qué blogueas en última instancia? ¿Cuál es tu misión? Indaga, rasca, cava con tus propias manos si hace falta.
El mundo está esperando a que hables, lo único que tienes que hacer es tomar el micro.
Atención
El próximo miércoles 6 de noviembre a las 19:00 (hora española) Laura Ribas impartirá el webinar gratuito ”Los 8 Elementos Fundamentales Para Crear Textos Que Aumenten Las Ventas De Tus Productos o Servicios” al que te puedes apuntar rellenando el siguiente formulario: