Muchas veces, escucho mamás que me dicen que “de tecnología no saben nada”, y que tampoco les interesa. Qué con el celular viejo están bien, y que el mail no lo usan.
Yo creo que no podemos danos el lujo de apartarnos de la tecnología porque eso va a ser que en el corto plazo, también estamos cortando canales de comunicación con nuestros hijos. Y creo que en el mundo de hoy no podemos darnos ese lujo. Ellos necesitan contención, ayuda, acompañamiento también en el mundo digital.
Creo que como madres, muchas veces tenemos que dejar prejuicios y miedos de lado para aprender, actualizarnos y poder de esa forma seguirlos, estar con ellos, en el lugar donde se encuentren.
Cuando un chico escucha que a su mamá no le interesa la tecnología, ¿qué pensás que se le cruza por la cabeza? ¿Yo? Creo que siente que hay una parte de su mundo, una gran parte, que no va a poder compartir. Que si tiene logros, avances, encuentra cosas que lo apasionan en la red, no va a tener el primer impulso de mostrarte, de contarte, porque ya le aclaraste que no te importa.
Las mamas de hoy tenemos infinitos desafíos, y estar actualizadas en tecnología, nos guste o no, es algo mas que debemos agregar a nuestras tareas diarias.
El mundo digital llego para quedarse, y acá estamos nosotras aprendiendo, adaptándonos, no solo para el uso propio sino también para el de ellos, esos niños, niñas y adolescentes con herramientas que pueden manejar, pero quizas no comprender en su totalidad.