Portadas del 2010: lo que el agua se llevó...
Me puse a revisar todas las portadas del Espectador en el 2010: año de bicentenario con urna centenaria casi embolatada, Mundial de fútbol con España (y el tercero en línea sin Colombia), Maradona engreído y el pulpo Paul sazonado, Barcelona y Messi en el cielo, crisis del Euro y populismos ascendente en Europa con los Berlusconis y Sarkozis fashions-fachos, elecciones presidenciales en Colombia y Brasil, sequía, invierno, Vargas Llosa y su nobel, Muerte de Saramago, y de los directores franceses Chabrol, Rommer y Cornu, Wikileaks en la mira, Chavez manso, trancones en Bogotá, Lucha encomiable de las cortes colombianas, parapolítica desde USA, Asilos en Panamá, mineros chilenos en sus dobles vidas, terremoto en Haiti y zombies, Memorias y demandas de Ingrid Betancourt, modelos por doquier, Vergara, et al, Más Juanes y Shakira “por un ratico”, deportes agridulces con brillo femenino (como en el futbol de las colombianas) y los circuitos de tenis, formula 1 y ciclismo, Campeonato del Once Caldas con el otrora “recreacionista” Osorio, año para olvidar en Millos y River Plate, Declives de las FARC, Obama y Samuel Moreno, Noemi y muchos más, reencauche de Mockus, Vargas Lleras y Petro, Visita de 12 escritores colombianos a Francia con sociólogo de cabecera para “explicar” (¿entender?) sus obras, la ida de Uribe y la caída en su caballo, y la venida de Santos con la sombra tranquilizadora de su abuelo a cuestas. Para mí la portada del año fue la del jueves 21 de octubre, titulada: “La más valiente”, dedicada a Marisol Valles, Jefe de Policía en Guerrero- México. Símbolo de una lucha desigual y perdida desde el principio.
Ahí queda la postal resumida de este 2010, en ese titular del Espectador que termina cubriendo casi todo el año: “lo que el agua se llevó”. El resto será literatura o no será más que olvido, sin que suene a parafraseo de Abad Facio-Lince. El resto es casi una suite de 2666 de Bolaño...
Gabriela Amar
Bogotá