¿Hay alguna obra que no hayas soportado al principio pero que luego te haya maravillado, y por qué crees que pasó eso?
Paula del blog Tierra de Fay me dejaba esta pregunta en twitter. Si no seguís a Paula, hacedlo: es un amor de persona y además de escribir (tengo pendiente leer algo suyo que no sea el blog, prometido) le encanta la fantasía feerica y los videojuegos. ¿Qué más se puede pedir?
Pero contestando a la pregunta -que está bastante difícil- no creo que me haya pasado nunca nada así.
Por una parte suelo acercarme a mis lecturas con bastante buen criterio, cosa que debe depender de un sexto sentido o algo así porque también sabéis que me gusta acercarme a los libros en modo tabula rasa y conocer lo menos posible de ellos, incluyendo en algún que otro caso no leer siquiera la sipnosis. Aunque esto es bastante raro y casi siempre conozco algún detalle del que me fio para saber si acercarme o no, a no ser que me hagan una recomendación directa.
Así que por una parte es muy difícil que me acerque a los libros con expectativas, que creo que es la condición para que una obra te guste más o menos que "lo que esperabas". Por otra parte, si un libro no me produce suficiente curiosidad no me acerco a él, por lo tanto tampoco me acerco a libros "insoportables" sólo para saber si la cosa cambia.
Lo más cercano a ese "principio no soportado y que luego mejoró" (tampoco me maravilló sensu estricto) puede decirse que me pasó con la bilogía de "El alzamiento".
"El alzamiento" son dos libros que narran un apocalipsis zombie y los intentos de supervivencia del protagonista de turno. He de decir que me acerqué a ella por recomendación directa por fiarme muy mucho del gusto de la persona que me la recomendó. Sin embargo hay cierta "peculiaridad" del tipo de zombie que encontramos en "El alzamiento" que pensé que no me iba a gustar. Si, tal vez me guste demasiado el zombie clásico (y sus variantes más o menos canónicas) al igual que me gusta el vampiro clásico (y sus variantes que retienen gran parte de ese clasicismo como son los vampiros de White Wolf o los de Ann Rice como mucho) pero debo decir que ese "ligero" cambio me gustó como fue llevado porque dentro de la historia tenía sentido y bien llevado -como está- queda bastante bien.
También he de confesar que me acerqué a "La leyenda del bosque que nunca existió" con algo de escepticismo por mi parte, ya que era un envio editorial de un autor desconocido por mi y que recién salía de haber tenido una mala experiencia lectora con mi primer autopublicado. Tampoco es que no soportase el principio, pero si que me acerqué teniendo en mente que podría ser otro fiasco. Y sin embargo me encantó. No sé si el haberme acercado temiendo lo peor pudo influirme de alguna manera o si fue el propio encanto de la novela lo que hizo que terminase convertida en una de las mejores lecturas de 2014. (Personalmente creo que fue lo segundo, o por lo menos quiero pensarlo.)
Creo que estos dos casos son lo más cercano a poder contestar a esta pregunta en condiciones. Y vosotros, ¿soléis acercaros a vuestras lecturas conociendo datos de antemano? ¿Vuestras expectativas os han defraudado alguna vez?
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La cita:
Me comeré «partida» el día que salga hacia el cráter Schiaparelli. Me comeré «medio camino» cuando alcance los 1600 kilómetros de recorrido y «llegada» cuando llegue allí. El cuarto es «sobreviví a algo que podría haberme matado», porque alguna putada seguro que me pasa, lo sé.El marciano (Andy Weir)