Hoy día está muy extendido eso de "intolerancia a la lactosa", la lactosa es el azúcar de la leche. Pero por otro lado está la alergia a la proteína de la leche de la vaca (aplv), y aquí la historia se complica. Ya que es cada día más fácil encontrar productos sin lactosa, pero sigue siendo muy difícil encontrarlos sin "trazas de leche", y ahí topamos con las proteínas de la vaca.
La verdad, no sé cuantas etiquetas de alimentos llevo leídas. Y me he encontrado las "trazas de leche" en los alimentos más inverosímiles como tostadas, biscotes, embutidos, etc. Mi gran pena vino con el chocolate, ya lo sabéis, soy chocoadicta, de algo hay que pecar en esta vida.
Y resulta que ni una sola tableta de chocolate de las que venden en el super está libre de "trazas de leche", por negro que me comprara el chocolate... Pero siempre hay un rayo de esperanza, el cacao puro en polvo. El que más se conoce es el de la marca Valor, aunque creo que hay algunos más.
Así que el lado goloso de mi cabeza se puso a pensar y resultó este delicioso postre, que se hace de manera muy sencilla y con sólo tres ingredientes. Y por supuesto, si no tienes intolerancias ni alergias, puedes hacer este postre con la leche que tomas habitualmente.
- Medio litro de leche de almendras (también sirve cualquier otra vegetal como la de arroz, soja o avena)
- 40 gr. de maicena (2 cucharadas colmadas) (Harina fina de maíz)
- 40 gr. de cacao puro en polvo (2 cucharadas colmadas) He usado el de la marca Valor, que se vende en lata.
En cuanto al azúcar, se puede añadir un par de cucharadas. Pero hay que tener en cuenta si la leche vegetal que estamos usando ya lleva azúcar, en mi caso he usado leche de almendras que ya viene azucarada (la compro en Mercadona)
1. Mezcla la leche con la maicena, en frío. Remueve con una cucharilla hasta que no queden grumos.
2. Añade el cacao y remueve de nuevo, hasta que se disuelva por completo y no haya grumos.
3. Lleva a ebullición la mezcla (que empiece a hervir), sin dejar de mover. Ya que la maicena espesa muy rápido, si tienes varillas de batir en casa, usalas, y si no mueves con una cuchara.
4. Sirve en los recipientes que hayas elegido, deja templar a temperatura ambiente y enfría en la nevera mínimo 4 horas (una noche entera es lo más apropiado).
Para servir, se puede hacer a modo de natillas, o volcarlas en un plato y queda como un flan de chocolate.
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