Taylor
(1965) dijo que “todos los
humanos tienen algún talento artístico, dramático, musical,
social, técnico”
lo que muchas veces no sabemos que las tenemos o al no practicarlas
no podemos potenciarlas.
Sería
muy bueno que en las escuelas hubiese más espacios y horas para
talleres de creatividad y expresión con profesionales que pudiesen
trabajar para estimular aficiones, talentos, recursos,
características, aptitudes y habilidades en los pequeños.
Actualmente en el momento en el que vivimos, sabemos que estas son
las primeras cosas en las que se recorta y que los profesores
disponen de menos tiempo y están sobresaturados, aunque consideramos
que estas actividades puedan ser igual de importantes que las demás
asignaturas que se tengan que impartir. Pero ¿cómo pueden los
padres ayudar en potenciar el talento de sus hijos? Bien,
consideremos que hay muchas actividades con las que podemos estimular
a los niños y niñas, como son por ejemplo pintar, realizar deporte,
música (tocar algún instrumento o bailar), la lectura y la
escritura, etc. Además de dejar que el niño exprese su creatividad
en casa recortando, tocando, pintando, inventando con distintos
materiales (plastilina, construcciones, pinturas, rotuladores…) y
siempre adaptándolas a su edad y sus capacidades. Es bueno que los
padres y madres os involucréis, les animéis a que creen, hagan y
deshagan, aportando un carácter de juego y diversión, que hará que
los pequeños asocien estas actividades a momentos agradables y de
distracción, que les motivarán a seguir y a mejorar
Tened
en cuenta que es bueno que participen en actividades en grupo;
fomentar visitas familiares a museos, galerías, parques, etc.; además de ir al cine, al teatro y a conciertos, así como
dedicar algún tiempo a ver la televisión de forma constructiva (y
siempre controlando los tiempos) acompañados por vosotros, para que
les podáis explicar mientras compartís momentos juntos.
Es
muy importante que los padres podáis reconocer las fortalezas y
potenciales de vuestros hijos, que podáis desde casa proporcionar un
ambiente y un trabajo de ayuda a que los niños crezcan y aprendan de
la mejor forma posible y con todos los recursos que podáis
brindarles, y sobretodo con vuestro apoyo incondicional, de modo que
se pueda garantizar un trabajo en conjunto con la escuela y poder
obtener mejores resultados por parte de vuestros hijos.