Ahora que he leído unos días sobre tenis (porque DFW me lo ha impuesto: no soporto el tenis más que en las contadas ocasiones en que soy yo quien juega), también creo recordar que Pete Sampras, creo que tras Ivan Lendl y la actual fase de dictadura combinada por Federer (me cae simpático) Nadal (no lo soporto: ¿cómo puede ser del Madrid el sobrino de una destacada figura del Barça de los 90?) y Djokovic (del cual hasta la fecha soy incapaz ni de retener su estructura facial ni de haberme formado una opinión tan tibia y escasa de argumentos de peso como los dos anteriores) llegó a ostentar el número 1 en la clasificación de la ATP (gracias de nuevo a DFW sé que esa clasificación es una especie de timo encubierto) sin haber llegado a ganar ningún Gran Slam, cosa que subsanó en muy escaso margen de tiempo y creo (que va con "c" -cosa que correspondería al párrafo anterior - y que estoy empleando en exceso aquí, pero es que quiero escribir, no consultar la Wikipedia) que ahora es, incluso, de los tenistas que ha conseguido más títulos Gran Slam.
Por cierto, compruebo que Keke Rosberg fue el que alcanzó tal proeza, pero confirmo que se produjo en motociclismo (curiosamente una mezcla entre ciclismo y automovilismo técnicamente hablando) cuando Sebastià Alzamora se alzó con el campeonato mundial en 125cc sin ganar una carrera.
O sea, que oigáis el disco y no jodamos más.
Selene: el fantasma lo estamos compartiendo. Completamente seguro.