POR FUENTES, POZOS Y VIEJOS MOLINOS
Me pasa con cierta frecuencia que buscando información de un lugar concreto me aparecen resultados de algo que poco tiene que ver con el objeto perseguido, pero que abre nuevas inquietudes, tan atractivas o más que la intención inicial. Y un ejemplo de ello son los Pozos del río Sorbe. Río por cierto, que ya nace con cierta confusión, ya que oficialmente es Sorbe desde la junta de los arroyos de la Dehesa y de la Hoz (este unión del Lillas y Zarza con sus fuentes en Tejera Negra), pero que los vecinos de Campisábalos y Galve de Sorbe lo llaman a lo que los mapas denominan "de la Dehesa" (el arroyo de la Dehesa también aparece en algunas publicaciones como el Sorbe de Galve).
Las inquietudes montañeras es mejor resolverlas cuanto antes, y a ello nos ponemos un día con dudosa meteorología, sabiendo que en ocasiones las previsiones en cierta medida "catastrofistas" no se cumplen. Pero resulta que a veces los meteorólogos aciertan y una persistente tormenta en mitad de la ruta nos hizo abortar el plan trazado, y dejarnos a medias llegar a esos pozos que tanto nos llamaban la atención. Dos semanas después volvemos a la carga, y el día de la marmota o eso de tropezar dos veces en la misma piedra parece una condición indivisible del ser humano, solo que en esta ocasión la lluvia escasa la daban a una hora concreta minimizando el riesgo.
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