La intención de los directores y también guionistas de este largometraje está clara, rizar el rizo en las historias sobre viajes en el tiempo y crear la paradoja definitiva para que el espectador se devane los sesos ante lo inconcebible. Este objetivo lo consiguen con recursos demasiado rebuscados pero que convierten la experiencia en todo un reto para los aficionados a la ciencia ficción. Una cosa hay que dejar clara, no es un thriller, no hay acción y casi todo lo que nos muestran son conversaciones y hechos de la vida de sus protagonistas enfocados únicamente a plantear una pregunta sin respuesta, ¿qué fue primero el huevo o la gallina?Mi puntuación: 5/10