Prepararse al parto a lo sueco: el método Heli

Por Y, Además, Mamá @yademasmama

Dicen que el cuerpo de una mujer de parto consume de media 500 kcal por hora, lo mismo que un corredor de maratón. Un enorme desgaste físico y mental en un momento para el que es necesario prepararse y sacar provecho de las herramientas del propio cuerpo.

Se habla de muchos métodos para prepararse al parto (Lamaze, Bradley) pero en Navarra más de 50 parejas se han preparado ya por el método sueco Heli, el que enseña la matrona Susana Cerdán. Pero, ¿qué hace especial al método sueco? y si es tan exitoso, ¿por qué no se aplica de manera generalizada en el sistema sanitario?

He querido hablar con Susana, a la que conocí personalmente en el primer Mum’s on the rocks, para conocer más de cerca este método. Ella es enfermera, matrona y madre de dos hijos, además de la fundadora de Mamis y Bebis desde donde también imparte masaje infantil, gimnasia acuática para embarazadas y cursos posparto.

- En un momento en el que hay muchísima información para el embarazo y el parto, e incluso preparaciones online, ¿qué tiene de especial el método sueco de preparación al parto?

- Este método tiene la peculiaridad de que parte de una base muy sencilla: menos es más. Cada mujer tiene la capacidad innata de parir, siendo factores externos como el miedo, el estrés, o el desconocimiento, los que pueden bloquear esta capacidad. Por eso el método se basa en principios fisiológicos, en entender cómo se comporta el cuerpo de la mujer durante el parto a nivel hormonal, físico y emocional. Una vez las parejas han entendido esto, identificamos qué herramientas nos proporciona el propio cuerpo para trabajar durante el parto.

Es la gran diferencia: no aplicamos técnicas externas que haya que aprenderse o practicar, y que se nos van a olvidar en el momento del parto, sino que ayudamos al cuerpo a trabajar con sus propias herramientas de forma natural. Es un taller fundamentalmente práctico, que creo que es algo que se queda corto en las preparaciones al parto que se ofrecen hoy en día.

- ¿Por qué no se aplica esta preparación de forma generalizada? ¿Es por desconocimiento?

- Pues no lo sé. En el mundo de la obstetricia y la ginecología todavía pesa bastante el “porque siempre se ha hecho así”, y de hecho estamos bastante desfasados en cuanto a actualizarnos e implantar conocimientos nuevos a nivel de organización. A nivel personal sí que hay muchas matronas que están haciendo mucho y muy bien, pero muchas veces sin el apoyo de la institución para la que trabajan, como por ejemplo cambiando protocolos de actuación de forma generalizada.

- Imagino que no cualquier matrona puede impartir el método sueco, ¿se requiere una formación especial como instructora?

- Este método se imparte hoy en Suecia como parte del currículo durante la residencia de Matronas, es decir, toda matrona que empieza a ejercer como tal desde el 2009 trabaja con este método en su día a día, ya sea en paritario o en atención primaria. Para ser instructora sí que se necesita una formación específica, que se realiza en Estocolmo una vez al año.

- Has hablado de ayudar al cuerpo con sus propias herramientas, pero ¿está pensado para mujeres que se plantean un parto natural o también para las que optan por la epidural?

- Está pensado para todas las mujeres, de ahí que sea tan aplicable. Ya quieras parto medicalizado o natural, las herramientas y el conocimiento sobre el trabajo del cuerpo durante el parto van a ayudarte en todos los casos.

- ¿Qué técnicas se enseñan para aliviar el dolor de manera natural?

- Un abanico de técnicas diferentes: técnicas de presión sobre distintos puntos de la pelvis o las piernas, técnicas de masaje, corrección postural para aumentar los diámetros de entrada y de salida de la pelvis, para que el bebé tenga más espacio para rotar y haya menos presión (y dolor) para la madre, técnicas de respiración, técnicas de analgesia natural no farmacológica…

- ¿Qué papel juega el padre o acompañante en esta preparación?

- El papel del padre, pareja, o persona de apoyo es fundamental durante el taller. Hasta tal punto que no les dejo venir solas, simplemente porque no van a sacar ni la mitad de partido del taller. Yo siempre les digo que hacen falta dos para hacer un bebé y hacen falta también dos para que salga…;-)

Todo el taller está pensado para trabajarlo en pareja, y un tercio va dirigido exclusivamente a las parejas. ¿Por qué? Porque hoy en día sabemos que el apoyo continuo durante el parto es el único factor determinante tanto para la experiencia de parto que va a tener la mujer, como a nivel médico, con un porcentaje significativo en reducción de tasas de cesáreas y partos instrumentales. ¡Solamente por sentirse apoyadas de forma efectiva!

- ¿Es una preparación al parto que van a poder practicar perfectamente en su hospital o sólo según qué centro elijan o qué matrona les toque?

- Se puede aplicar donde sea, no dependemos ni de recursos físicos ni de la matrona, ya que aprenden a trabajar juntos en pareja y utilizando herramientas propias del cuerpo… Lo único que pueden necesitar es una bola de fitness, una silla…. ¡Y el resto lo ponen ellos!

- ¿A cuántas parejas has ayudado hasta el momento? ¿Qué es lo que más han valorado de estas clases?

- Desde que empecé con el taller en mayo del 2014, son ya casi 50 parejas las que lo han hecho. Son grupos muy reducidos de 3 o 4 parejas, para poder trabajar con cada uno de ellos. Lo que más valoran es la utilidad práctica de lo que aprenden, la tranquilidad y serenidad con la que afrontan el momento del parto al sentirse bien preparados y el enfoque tan importante que damos a la pareja y su papel fundamental en el parto. El taller se recomienda hacerlo desde la semana 30 de embarazo.

También hay muchas parejas que han combinado esto con la gimnasia acuática durante el embarazo. Esas parejas llegan al parto con la pelvis perfectamente preparada, muy elástica y dinámica, a la vez que llevan las herramientas para trabajar durante el parto. Es una preparación muy completa que está gustando mucho.

Muchísimas gracias, Susana, por participar en el blog.

¿Qué os parece el método sueco?