Para la construcción del centro el Gobierno destino 42 millones 219 mil 426 de bolivianos (seis millones 92 mil 269 dólares).
Según el jefe de Estado, la capacidad de producción será de 250 toneladas de miel al año, y recordó que el centro apícola de Yapacaní, hasta ahora el más grande del país, produce 60 toneladas por año.
Estamos empezando una industria, estamos obligados de hacer sus gemelas, principalmente en los departamentos de La Paz, Santa Cruz y Tarija, destacó.
Añadió otros contenidos del proyecto, que incluye una escuela de manejo apícola, un centro de mejora genética de abejas y un laboratorio de sanidad apícola.
Morales recordó las circunstancias en la que vivían los pobladores del trópico antes de 2006, con acciones de los gobiernos de turno, orientados a dejar sin tierra a los campesinos de El Chapare.
Por esa razón, destacó la lucha permanente por defender la coca, el territorio y la dignidad.
Quieren control político, con bases militares, con soldados norteamericanos armados, para saquear los recursos naturales, para que sus empresas sean dueñas de nuestros minerales, hidrocarburos; eso no sólo pasa en Latinoamérica sino en todo el mundo, fundamentó.
El presidente afirmó que la situación cambio porque, a su juicio, la política no es hacer plata, sino es servir a la vida, a la humanidad, al pueblo boliviano.
Ese es el cambio profundo, aunque cuesta cambiar de mentalidad, descolonizar a algunos funcionarios, ojalá las nuevas generaciones tengan una nueva mentalidad. Estamos en el proceso de profundas transformaciones en bien de todos y todas, aseguró.
El mandatario les deseó muchas felicidades a los bolivianos por las fiestas navideñas y les pidió meditar sobre lo que se puede hacer para mejorar al país.
Navidad es la fiesta de hermandad, solidaridad, amistad, encuentro de las familias, es una noche de reflexión, pensar en lo que hemos hecho, pero también en que podeos hacer para mejorar a Bolivia, agregó Morales.
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