Pretty Little Bodrios (PLB #1) Sin alma de Gail Carriger

Nos ponemos el corbatin, las medias rotas y remendadas con barniz de uñas por detrás, el saco empolvado del abuelo y el vestido de la tía solterona y nos preparamos para lo mejor que está por llegar. Nos sentamos sudorosos en las sillas con espaldar recto para presenciar el acontecimiento multitudinario que se viene y nos tomamos las coca-colas nerviosos y nos tragamos las palomitas de una sentada de la emoción. Porque llega, llega, llega. *Suspiros en el público y a alguien le suena el celular* LLEGA..... *OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOH* Y RE LLEGÓ.....
Una nueva sección.
¡Como lo oyen! ¡Llegaron las no-reseñas al blog! *Aplausos enloquecidos de la audiencia librera*
PLB: Pretty Little Bodrios

Libros que recibieron recomendaciones y halagos bloggeros o no. Pero que a mi, como lectora viciada y compulsiva le parecieron un bodrio monumental o de proporciones épicas y no los pude terminar.
Y ahora viene la breve explicación para que no hayan confusiones. No me gusta la serie a la que le parodio el nombre de esta sección. Igual que los libros que reseñaré aquí, me parece un Bodrio. Vamos al lío.
Sin alma (El protectorado de la sombrilla #1) de Gail Carriger
Editorial Versátil ~  9788492929245
No lamento ser la oveja negra de la bloggosfera, en verdad que no. Pero como ustedes saben que me río de cualquier cosa (sobre todo de los libros malos) y me tomo con humor los chascos libreros, por así decirlo. Pero comencemos desde el principio. 
Quiero aclarar que leí este libro en ebook, por miles de recomendaciones de muchos amiguitos bloggeros (a pesar de todo los quiero) y por un reto que había organizado la señorita Beleth. Lo tuve que leer en el computador porque en mi país *isla perdida solitaria en el hemisferio sur* no se consigue y porque soy una pobretona y no tengo kindle ni nada de eso. Alcancé a leer unas 150 páginas y alegremente lo abandoné. Y ahora les contaré porqué.

Ejemplo de solterona

Alexia Tarabotti vive en el siglo XIX en un Londres medio futurista donde al parecer los avances tecnológicos son algo superiores, porque la gente vuela alegremente en zeppelines cual avión y hasta pueden dormir y beber té (pobrecillos los que estaban comiendo panecillos en el accidente del dirigible Hinderburg muchos años después). Y para colmo de males es muy italiana, es muy solterona y no tiene alma. 
Pero sus problemas inician en una fiestorra, en la que la pobre chica estaba más que aburrida en la biblioteca. Porque mientras se miraba las uñas y se las limaba con la punta de la sombrilla, entro un ser por la puerta (que entrar por la ventana es muy mainstream) un ser que era un vampiro resultón que estaba en urgencia de sangre y que mejor que una solterona resultona.
Luego de cargarse al vampiraco sin despeinarse y con una sombrilla asesina, la señorita Tarabotti tendrá un altercado verbal con el tipo tipaco en el mismo lugar de la escena del crimen (como si nada hubiera pasado) El hombre lobazo irremediablemente bueno pero mal vestido: Lord Conall Maccon. Y ella, con su lengua viperina y sin cortarse ni un pelillo, le monta la escena de mujer fuerte pero a la vez reina del drama que ha sido atacada pero que a fin de cuentas no le pasó na' porque ella NO TIENE ALMA (No tenerla consiste en ser un preternatural y cada vez que un ser sobrenatural la toca pierde sus poderes. Y punto pelota).
Y lo que sigue hasta el punto donde leí es una sucesión de visitas en carruaje, conversaciones con amigas de sombreros horribles, discusiones con hombres lobos peludos mal peinados y momentazos de calentorreo, cruces de palabras con una familia rematadamente tontuna y unos asesinatos misteriosos por resolver.
En fin, no estaba mal y estaba hasta bueno. PERO...
Me aburrí como una ostra. No estoy segura si era porque lo leía en el computador o porque no me interesaba mucho lo que sucedía. La historia en si no está mal, es MUY bizarra y original por sus toques steampunk, a ratos lo sentí como una parodia de la sociedad londinense de la época. Si bien la autora logra dotar la narración de un humor único cargado de frases hilarantes la verdad es que no alcanzaba a emocionarme como quisiera o realmente interesarme sobre lo que le sucediera a Alexia y su sombrilla. 
La protagonista me pareció BIEN, es divertida, sarcástica, ingeniosa no es perfecta como la pintan en tantos otros libros y esta consciente de su condición en la época, que era una solterona que vive con sus padres *drama*. Pero no pude evitar que me pareciera muy cargante e irritante a ratos. Los personajes están bien. Se me hicieron algo típicos por sus personalidades empaquetadas y algo tópicas, pero al menos están interesantes y no son meras sombras correteadoras.
Ya iba casi por la mitad del libro y me pasó lo peor que le puede pasar a un lector viciado: ME OBLIGÉ A LEER. La verdad quería terminarlo porque sentí que me perdía una buena historia, pero había tantas cosas que no me convencían. Como dije, no me llegó nada la historia, no conseguí identificarme o al menos empatizar con la protagonista y el misterio y las averiguaciones se perdían en idas a tomar el té y calentorreos varios (aunque me eché unas buenas risas).
En fin, una propuesta original y cómico festiva que no terminaré. No he leído libros ambientados en una época antigua con toques steampunk. Tal vez no sea lo mío. Debe ser eso, que la misma novela. No tengo argumentos para quejarme si está mal escrita o no, pero supongo que en inglés costaría un poco leerla por la terminología enredada a ratos. Hasta yo tuve que buscar en un diccionario qué era "polisón". Busquen no sean vagos.
Termino la reseña diciendo que hace como 3 semanas que lo abandoné y ya no recuerdo gran cosa. Creo que no me equivoqué al hacerlo por esa misma razón. Aunque los sombreros de la señorita Hisselpenny sean horribles, no pienso seguir esta saga.