AUSTRALIA, 2010
TÍTULO ORIGINAL: Primal
DIRECTOR: Josh Reed
PRODUCTOR: John Cordukes, Rob Gibson, Nigel Christensen
GUIÓN: Josh Reed, Nigel Christensen
REPARTO: Krew Boylan, Zoe Tuckwell-Smith, Will Traval
DURACIÓN: 85 minutos
WEB: http://primalthemovie.com/
IMDB: http://www.imdb.es/title/tt1438534/
VALORACIÓN: 7/10
CANIBALISMO PRIMITIVO
Otra película de terror que nos llega desde la lejana Australia, donde parece que una hornada de jóvenes directores han decidido reactivar el género.
En esta ocasión nos encontramos ante el debut del director Josh Reed, que ha realizado las funciones de guionista, montador y director.
Primal es una película que no nos va a aportar nada nuevo (a mí personalmente me parece un cruce entre Cabin Fever y The Descent), pero con la que los amantes del género pasaremos un muy buen rato.
Todo comienza con un tópico entre los tópicos, grupo de chicos y chicas jóvenes viajando en un coche con destino a un lugar retirado de la ciudad y gastándose todo tipo de bromas entre ellos durante el trayecto.
Este momento es utilizado por el director para presentarnos brevemente a los personajes, sus relaciones y sus previsibles perfiles: el gracioso, la que va todo el día cachondo, el líder, la rarita….
El destino de estos chicos es un recóndito lugar de las montañas australianas en el cual hay unas misteriosas pinturas rupestres que fueron descubiertas por un antepasado de uno de ellos, y de las cuales quieren realizar un estudio para su proyecto de carrera.
Al salir del agua aparece con todo el cuerpo cubierto de sanguijuelas, y durante la noche empieza a encontrarse muy mal mostrando como síntomas la fiebre y la repentina perdida de dientes.
Con unos síntomas tan extraños como estos nada bueno podía pasar, y Mel amanece como una brutal fiera con la única obsesión de comerse a sus amigos.
Aquí comienza la acción de verdad, y el film deriva en un juego de supervivencia del cual está claro que no todos saldrán victoriosos.
Tras la sucesión de varias muertes, llegamos a un desenlace que sin duda es la parte más floja de toda la película, tanto por lo inverosímil de la situación como por lo extremadamente cutres que resultan sus efectos especiales.
En el apartado visual destaca un curioso efecto de cámara que es utilizado en diversas ocasiones durante el metraje y que detiene la imagen durante un segundo para seguir con la acción a continuación y la saturación que se hace de los colores en los paisajes y que le resta realismo a la película.
En definitiva, Primal no nos va a ofrecer nada que no conozcamos, no nos va a hacer pensar y no destaca por su guion, pero si nuestra idea es pasar un buen rato con un film de terror directo y sin pretensiones esta es una muy buena opción.