¿Qué edad tengo?, preguntas. Te sacaré de dudas. Tengo la edad de cuando era virgen y buscaba la forma de ahorrar dinero para ir con una puta que me enseñase algo de lo mucho que imaginaba. Tengo la edad del asombro ante el hecho de que los pezones de una mujer se tornen duros de repente. Tengo la edad de cuando se está seguro de que en todas las partes del mundo viven, piensan y sufren o ríen como yo. Tengo la edad del egocentrismo altruista.
Tengo la edad de mentir y que se me note, y también de la risa cómplice entonces. Tengo esa edad buena en la que todo está a punto de suceder: el hoy es un segundo que tiembla inseguro, el pasado no ha existido y el mañana no es sólo todo lo que queda, sino que también es lo único que llena el pensamiento.
Mi edad es la de quien sonríe sin saber por qué, pero que se sabe feliz: sí, la del tonto, si quieres verlo así. Y es que tengo la edad que tenía cuando me enamoraba en cada esquina. En serio, tengo la edad de las primaveras y de los veranos que no se acaban, de las fiestas que están a punto de empezar, de las palabras vacías pero llenas de promesas, de las miradas de miedo inseguro y gesto altanero.
Tengo la edad que tú pretendas y la facilidad de mutar de tal manera que nadie advierta que me faltan años o me sobra experiencia.
Tengo la edad de los cielos vistos, de las palabras dichas y de los silencios necesarios.
Tengo esa edad que nunca termina y que siempre está amando. *
Gracias:www.youtube/user/edgarivanrivero
*Adaptación del relato anónimo
“Edad” extraído de escolar.com