El alcalde de la ciudad, Eduardo Paes, explicó a periodistas que todavía se investigan las causas del estallido, pero precisó que los bomberos creen que se trata de un escape de gas.
Asimismo, el subcomandante del Cuerpo de Bomberos de Río, el coronel Ronaldo Jorge Alcántara, corroboró esa teoría y descartó el riesgo de derrumbe del edificio, a pesar de que la estructura ha resultado dañada.
La explosión, que provocó abundantes daños materiales, tuvo lugar en la cocina de un restaurante ubicado en los bajos comerciales de un edificio, frente a la Plaza Tiradentes, en el centro de Río.
Hasta el momento dos de las tres víctimas mortales ya han sido identificadas como empleados del local y los equipos de salvamento precisaron que otras 13 personas resultaron heridas, tres de ellas, en estado grave.
Los bomberos se desplazaron al lugar de la explosión para atender a las víctimas y evacuar a las personas que hubieran podido quedar atrapadas en el edificio siniestrado.
Varios establecimientos próximos resultaron afectados y las imágenes difundidas por los canales brasileños mostraron la abundancia de escombros.