Está graciosísimo con esos andares de pato mareado y la risa de emoción que le entra cuando va caminando. Me encanta la carita con la que me mira, mientras se acerca a mi riendo y con expresión de... ¡ mira mamá lo que sé hacer !. ¡ igual que vosotros ! . ¡ Es que me lo comería a besos !
Además, se está volviendo un bichillo al que le encanta ir a provocar a su hermano o a su padre para que le persigan y así él poder echar a correr y esconderse. Esta es la fiesta que tenemos cada noche antes de irnos a dormir. No puedo decir que nos aburramos en esta familia, jajajaja.
Por otro lado está el tema de que ya llega a más sitios y si no se las ingenia para llegar, asi es que hemos tenido que redecorar una vez más las estanterias y armarios para que no haya peligro. Ha aprendido además, a montar en un correpasillos al estilo patinete, porque si no no le llegan los dos pies al suelo y el otro dia le pillé intentando montarse en la bici de Adrián. ¡ Menudo trastillo está hecho !, pero me encanta que sea así, auqnue reconozco que a veces es algo cansado porque no para, pero bueno, todo pasa y después se echa de menos.
Adrián está feliz de ver cómo evoluciona su hermanito. Cada vez que hace algo nuevo me llama a gritos diciendo: ¡ Mira mamá , bebé ya ha aprendido tal o cual cosa !. Le encanta además darle la mano para que camine con él. ¡ Cuánta ternura !
Asi que así estamos. Entre la ilusión de ver a nuestro duendecillo dar sus primeros pasos y la sensación de que está creciendo demasiado rápido, mucho más que Adrián. Una mezcla de sentimientos de alegria y nostalgia, de disfrutar cada momento y de desear que no pasen..... . Pero asi es la maternidad y la alegria de verles crecer en libeertad y felices compensa cualquier otra cosa.
Que tengais un buen comienzo de fin de semana
Besos