Principia magazine 2

Pues nada, después de haber comido por 5 estas fiestas hay que intentar volver a coger esas rutinas saludables: comer más fruta y menos turrón, más verdura y menos marisco, beber más agua y menos vino, más actividad física y menos sofá, leer más ciencia y ver menos las tele. Y en estas que día 30 de diciembre del 2015 (parece que fue ayer) me llegó un aviso de Correos: mi principia magazine 2 estaba esperándome, en una estantería fría y repleta de otros enseres que no habían podido ser entregados en esas fechas. Tardé todavía un par de días en poder recogerla, pero cuando cayó en mis manos, empecé a devorarla con frenesí. No es todos los días en los que puedes tener entre las manos el concepto de Principia en formato físico . Bajo la máxima de una única cultura y bajo el hilo conductor del invierno Principia nos presenta una buen número de historias que además de entretener, divulgan ciencia. A su vez cada historia se acompaña de un pedacito de arte, que como como el oxígeno y el hidrógeno se juntan para formar algo tan vital y fantástico como el agua. Os voy a dar una un breve paseo para enseñaros esta pequeña maravilla:

Después de una magnífica editorial que sirve para  ponernos en antecedentes nos encontramos con el artículo “una bombilla, medias, Ford T y una impresora” donde César Sanchez nos habla del concepto de la obsolescencia programada. Le sigue “¿colores que curan?” donde Isidoro Martinez se ocupa de desvelar algunas intimidades sonrojantes de la cromoterapia. Giramos la página para llegar a “científicos de película“, en el que Alfredo Manteca Cano nos disecciona la relación entre Hollywood y los investigadores acompañado de una ilustrativa infografía sobre el tema. Después de esto llegamos a nuestra pequeña aportación a este número, con “el blues de la melatonina“, donde el que suscribe habla de la relación entre los estados depresivos asociados al otoño y la melatonina. No sabemos si con melatonina o sin ella, en las siguientes páginas Jesús David Tavira habla de “el sueño del oso“, ilustrado por Martina Billi y con fotografías del autor. Llegamos al comic de Carlos Roman y Gerardo Sanz donde el protagonistas se las tiene con el colesterol.

Llegamos a “supera el examen“, de Jose Ramón Alonso, donde habla de algo tan asociado a estas fechas como los exámenes y la retención de los conceptos. Seguimos con la historia que nos trae Fernando Gomollón-Bel, “los colores del otoño”, donde mitología y ciencia se aúnan en la prosa, seguida de una bonita infografía sobre el tema. Em “mitos micológicos” Aitor Ameztegui nos habla de algunos mitos asociados a ese manjar de temporada que son las setas. En “frío en la cocina”  JM López Nicolas escribe sobre la cocina, su relación con el frío y los recetarios vanguardistas. La relación que existe entre las matemáticas y la música nos la desvela Moises Herradón en “armonía numérica”. Nahúm Mendez y su “precisión mineral” toca temas como los láseres y el flúor de los antiguos enjuagues. La ilustración de la portada acompaña a la siguiente recreación histórica de Patricia Rodríguez que es “el diario imaginario de Ingrid” sobre los viajes de Ingrid Christensen. Le sigue la infografía de Sr Brightside sobre Boston y algunos de sus rincones más visitables de Alfredo Manteca y Rafael Medina.

Pasado el ecuador de este Principia 2 nos encontramos con “el alfabeto químico de las hormigas”, que con una ilustración carroliana de Eneri Mateos Josep Biayna nos habla de las feromonas de los insectos sociales. En “la vida en suspensión” Dani Moreno nos explica como se la apañan ciertos organismos para poder sobrevivir a gélidas temperaturas. JAL Guerrero en “la menos española de todas las gripes” nos habla de censura, de saltos y derivaciones antigénicas. Carlos Romá-Mateo en “terror ex-machina” nos presenta un inquietante texto sobre los límites de la inteligencia artificial. En “defensas contra el frío” Sergi Vila nos explica algunas estrategias para poder superar el fío. La siguiente “vivir más allá de del círculo polar ártico” Santi Campillo nos sumerge en ese extraño e hipnótico universo a la que acompaña una exquisita infografía de elabrelatas. Le sigue “no te gires” de Dani Gómez, ilustrado por Laura Wätcher, que nos habla de sinestesias y falta de oxígeno. Al girar página nos encontramos con el texto de Rafael Medina “gélida espera” al que ilustra Alissia que nos sumerge en el mundo las largas esperas en los vegetales.

En la recta final de este pincipia nos encontramos con más trabajos como los  de Ana Ribera (Molinos) con su “un criminal invisible” ilustrado por José Moreno que te sitúa en un escenario que quizás nunca imaginaste al final de la segunda gran guerra o “lo que el hielo dejó” de Marta Pérez Delgado” e ilustrado por Raquel Aparicio en el que se nos habla de el porqué de piedras solitarias en los valles. “Unos centimetros de iridio” de Silvia Mielgo Gallego con infografía de Atómico García narra las causas de una de las mayores extinciones. En “el futuro de los cristales de gigantes de Naica” de Juan Manuel García-Ruiz nos lleva a un mundo casi extraterrestre como se puede ver en las ilustraciones de Laura Wätcher. “Claro de Luna” de Galiana e ilustrado por Dabiz Molinero es un relato con
genética forense. Acabamos con un texto muy navideño de Antonio Perez-Verde ilustrado por Raquel Gu como es “el camino que lleva a Belén”.

Si no habéis comprado ya en la tienda de Principia vuestro ejemplar, la verdad es os estais perdiendo rellenar unas horas de vuestra vida con algo que, en mi opinión, bien marece la pena: Ciencia, cultura aunadas consumibles donde y como más os apetezca (con o sin música, en un sofá, en la butaca, en el metro o en la cama).