Todo eso no podemos abordarlo y discutirlo en una nota y mucho menos nosotros (muchos “profesionales” ya se han encargado de hacernos saber de que somos amateurs y que mejor deberíamos callarnos). Primero porque no hay tiempo y segundo porque la mayoría de estas cuestiones son decisiones políticas o empresariales que no pasan por nosotros.
Sin embargo sí hay algunas cosas que nos pasan cerca... nos rozan digamos.Hace dos años y medio comenzamos a escribir RUMBOVINO por afición, por pasión, como nuestro cuaderno de notas... como un “hobbie” sin pensar en nada más, y aunque esa génesis no ha cambiado, ahora sentimos que tenemos otras responsabilidades más importantes...Nos preguntamos para quién escribimos. O la pregunta quedaría mejor al revés. Quién nos lee?Qué tipos de vinos les interesan a la persona o las personas que nos leen?(estamos seguros que es más de 1, aunque no podríamos asegurar que sean más de 30). Qué tipos de vinos beben? Cuánto dinero gastan en sus vinos?...... La respuesta es muy difícil porque imaginamos que habrá de todo. Sí, habrá de todo; pero de cuáles hay más? De los que beben vinos de hasta $20 o $50, o más de $100? Además, a ellos les interesa la descripción del vino o solo quieren saber qué puede comprar para no clavarse? Siempre teniendo confianza en la subjetividad de nuestros gustos, claro.La verdad, esa pregunta no nos quita el sueño, pero nos interesa sobre manera. Porque no es lo mismo que quien te lee pueda gastar $10 o pueda gastar $100 en un vino... Y porque creemos que el blog, además de independencia a la hora de valorar un producto, debe tener contenido de utilidad para quien lo lee. Caso contrario carece de sentido y termina siendo un librito de cuentos, donde uno descarga sus aspiraciones de poeta frustrado. Esto último al lector de un blog de vinos no le interesa! Estamos seguros.Para ayudar a difundir la noble bebida necesitamos que la gente, primero nos entienda y luego encuentre lo que busca... Cada uno sabe por qué hace el blog y qué busca a cambio.