Principios del entrenamiento ciclista

Por Alejandro

El entrenamiento del ciclista está regido por algunos principios que, si se asimilan y se tienen en cuenta, el ciclista hará un buen uso del tiempo disponible y del esfuerzo del entrenamiento.
Cuando comenzamos a entrenar por primera vez, será normal que isntamos algún que otro dolor. Esto se pasará enseguida y, al tiempo, empezar a ver buenos resultados.

Carlos Sastre, uno de los mejores
profesionales del ciclismo
profesional, ya retirado. En esta foto
competía con el Cervélo.

Pero tamiéne s cierto que, según pase el tiempo, los progresos irán siendo cada vez más lentos y es normal que se llegue a un estancamiento (e incluso descenso, en algunos casos) del rendimiento.
¿Cómo se puede evitar ese estancamiento? Muchos ciclistas aumentan la cantidad o la intensidad. Aumnetar los kilómetros por cada sesión de entrenamiento puede resultar beneficioso hasta cierto punto. Si se hace en exceso, acabaremos aumentando aún más el estancamiento y muy cansados. Básicamente, aparece el llamado sobreentrenamiento crónico. Y, algo muy importante a la hora de hacer polanificaciones: tener en cuenta los principios. Así, veremos los resultados obtenidos. Si no los aplicamos todos o no los hacemos correctamente, no estaremos entrenando correctamente.
-Sobrecompensación
Siempre debemos tener en cuenta que al cuerpo, a un sistema o una estructura del mismo le sometemos a un esfuerzo, debemos dejar que se recupere.
Tras una o varias sesiones de entrenamientos, aparece la famosa fatiga. Si se descansa de este cansancio, la fatiga desaparecerá y nos acostumbraremos al esfuerzo del entrenamiento. A eso se le llama sobrecompensación.
Pero las mejoras aparecen durante un tiempo. Si dejamos que nuestro cuerpo vaya “a su aire” volveremos a la situación inicial.
-Sobrecarga
Está relacionado con la sobrecompensación. Funciona con la base de que, para poder mejorar la fuerza, el tamaño del músculo o la resistencia con el entrenamiento, se deben hacer ejercicios contra una resistencia mayor con la que, normalmente, no tenemos que tratar.

Vinokurov, del Astana,
otro ejemplo de gran
corredor profesional.
En este caso, aún está
en activo.

Cuando se hacen las mismas rutas a la misma velocidad, sin hacer variaciones, no se mejora. Debemos introducir una sobrecarga para mejorar.
En los entrenamientos, la sobrecarga consta de tres partes:
-Intensidad del entrenamiento.
-Duración del entrenamiento.
-Frecuencia del entrenamiento.
-Especifidad
El ciclismo es un deporte de fondo, por lo que necesitaremos hacer horas para poder ganar esa resistencia. Necesitamos trabajar intensidades (que nunca serán tan fuertes como en las competiciones) y, de vez en cuando, hacer los kilómetros o el tiempo de la competición. Y debemos ser conscientes de que ciertas cualidades las tiene el corredor, no se pueden desarrollar entrenando.
Los músculos que estén tensos durante los entrenamientos y las competiciones se adaptarán a las exigencias específicas que les pongamos. Por lo tanto, el entrenamiento debe diseñarse para aportar mejoras en las áreas de forma física necesarias para las competiciones.
Es de vital importancia saber qué queremos o necesitamos entrenar: velocidad, fondo, subidas…