En los tiempos que corren la privacidad en la red es tan importante como saber que a todos tus conocidos no les puedes contar tus secretos ni dejarías que nadie husmeara en tu cajón de ropa interior. ¿Por qué? por razones obvias, ambas cosas pertenecen a tu ámbito privado. El problema hoy día es que no tenemos sentido de responsabilidad de privacidad en nuestra vida digital.
Si algo hemos aprendido del maremágnum de noticias que ha suscitado el revuelo de ver a famosas ligeras de ropa es que la privacidad no entiende de escalas sociales, no importa que tengas mucho o poco dinero porque la seguridad 100% no existe, la diferencia la marca el sentido de responsabilidad digital. Que te vean ligero de ropa puede ocasionarte un problema pero no lo es menos si los datos que se filtran por ejemplo son tu historial médico, tu expediente de trabajo , académico o el proyecto empresarial que iba a darte miles de euros. Piensa por un momento que quieres sacar un seguro médico y la compañía tiene de antemano tu historial clínico. Puede suponer un grave problema que puede acarrearte incluso la denegación del servicio si no les sales rentable.
¿Cómo es posible que haya sucedido algo así? Esta es la pregunta que más controversia va a generar y lo veremos con el transcurso de las semanas ya que la compañía responsabiliza directamente a los usuarios por tener contraseñas poco seguras. La persona que filtró las fotos aprovechó un agujero de seguridad en la plataforma icloud. Cabe destacar que Apple aún responsabilizando a los usuarios sí que aplicó mejoras en su sistema y corrigió el problema de seguridad en previsión del aluvión de demandas que le van a ir llegando una tras otra. Entonces ya tenemos lío ¿Culpa de la compañía o de las modelos?. Por un lado es cierto que contraseñas frágiles ayudan a que surjan éste tipos de problemas pero no es menos cierto que la compañía que custodia nuestros datos tiene que garantizar la seguridad de los mismos.
¿Puedo ser yo una víctima? Claro que sí, y en estos artículos vamos a aprender a
- Elegir contraseñas seguras.
- Acordarnos de ellas (Que es tan importante como la primera).
¿Cómo puedo evitar que me pase esto a mí?
- Aplica algo que es gratis, el sentido común.
- Alguien me dijo una vez que el secreto mejor guardado es el que no se cuenta. Pues aplica esta norma para tus fotos íntimas, si algo no quiere que se vea no las subas a la nube (Icloud, Dropbox, Google Drive, Picasa…).
- Aunque no me vayas a hacer caso., pon una contraseña segura. Números, letras, mayúsculas, minúsculas y un símbolo. Si hace esto tienes mucho ganado.
Por lo expuesto anteriormente en éste caso la víctima no creo que sea responsable de la filtración tal y como se produjeron los hechos pero es cierto que es la parte más fácil a la que echarle la culpa. Por otro lado se vuelve a poner en duda la seguridad de los sistemas cloud y éstas noticias no ayudan a que los usuarios pierdan el miedo para depositar los datos en éste tipo de plataformas.
Solo me queda aconsejaros que fotos sí, pero si van a ser íntimas mejor échatelas con una Polaroid
AUTOR: Francisco Bellido, administrador de sistemas.