[Ricardo Portmán] @ecosdelvinilo
Esto no es para ser disfrutado. The Day Is My Enemy es un trabajo áspero, vertiginoso y en las antípodas de la electrónica versión 2015. Los Prodigy nunca han ido con la corriente. Eso les ha hecho tanto ganar como perder a lo largo de sus cinco trabajos de estudio anteriores. En el caso del nuevo álbum, el resultado queda en tablas, pero a la baja. Se hace evidente que la nostalgia por aquel sonido de los noventas, basado en riffs memorables, es el refugio de unos Prodigy que por lo menos mantienen la ferocidad. Por lo menos.