Hablar del Papa Juán XXIII es, para muchos, hablar del Papa Bueno como se le conoce y es que, ciertamente, Angelo Giuseppe Roncalli Mazzola pasó a la Historia del Papado por sus convicciones y su bondad. Nació en Bérgamo (Lombardía). En la localidad de Sotto il Monte el 25 de Noviembre de 1881 y falleció en el Vaticano (Roma) el 3 de Junio de 1963 siento pontífice de la Iglesia Católica entre 1958 y 1963. Fue beatificado por Juan Pablo II en el año 2000. En 1892 entra en el seminario de Bérgamo, siendo un alumno aventajado y escribiendo sus notas espirituales en “Diario de un Alma”. En 1901 es enviado Roma para continuar su formación en el seminario dell’Apollinare, donde se gradúa en Teología. En 1904 es ordenado sacerdote. Pronto, en 1905 es nombrado secretario de Giacomo Radini Tedeschi, obispo de Bérgamo, en dicho puesto se mantuvo hasta 1914. Cuando estalla la Iª. Guerra Mundial ejerce de sargento médico y posteriormente de capellán militar. Tras los duros años de la Guerra, en 1921, el Papa Benedicto XV lo nombra presidente, para Italia, del Consejo Central de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe. El día de San José, el 19 de Marzo, de 1925, es nombrado obispo de Areopoli; su lema episcopal sería “Obedientia et Pax” (“Obediencia y Paz”). El sucesor de Benedicto XV, el Papa Pío XI lo nombra Visitador Apostólico de Bulgaria y estableciendo relaciones con otras comunidades cristianas como la Iglesia Ortodoxa. En 1934 es nombrado Vicario Apostólico de Estambul (Turquía). Su ayuda y socorro a los judíos durante la II Guerra Mundial y el holocausto nazi fue básica, importante y crucial. En 1944, en Diciembre, Pío XII nombra a Roncalli nuncio apostólico en París y normaliza la organización eclesiástica en Francia, muy desestructurado por el colaboracionismo nazi de muchos de los obispos. El 12 de Enero de 1953 el Papa Pío XII nombra a Roncalli cardenal presbítero de Santa Prisca y tres días después le envía es Patriarca de Venecia. Con 77 años, el 28 de Octubre de 1958 es elegido Papa contra pronóstico. Eligió el nombre de Juan –por el Evangelista- y toma la Tiara de Pedro el 4 de Noviembre. Comenzó un dura reforma en la Iglesia, a él se debe el Concilio Vaticano II. Se reunio con el obispo de la Iglesia Anglicana Geoffrey Francis Fisher en Diciembre de 1960 (algo inédito) tras 400 años sin relaciones. Escribió ocho encíclicas y su magisterio social en “Pacem in terris” y “Mater et Magistra” muy valorada. Al Concilio fueron invitados miembro de otros credos, desde creyentes islámicos hasta indios americanos, e Iglesias cristianas (Ortodoxa, Anglicanos, Calvinistas, Cuáqueros, Protestantes, Evangélicos y Metodistas no presentes en Roma desde el tiempo de los Cismas). Juan XXIII muere en Roma el 3 de Junio de 1963 debido a un cáncer de estómago que no quiso operar. Su sucesor, el Papa Pablo VI en 1965 comenzó el proceso de beatificación tras la clausura del Concilio Vaticano II. Juan XXIII destacó por su calidez, por su cordialidad, por el trato afable, por ganarse el respeto y el corazón de las personas, por su humanidad extrema, por su sinceridad. Fue un Papa querido y el mundo lloro su muerte. Sus restos, embalsamado, descansan en la Basílica de San Pedro, en Roma. Pero la vida de Juan XXIII también destaca por su capacidad de anticipar acontecimientos futuros, son las denominadas profecías de Juan XXIII, profecías sobre las cuales el Vaticano guarda un respetuoso silencio pero que no niega ya que son públicas, de hecho el periodista y escritor Pier Carpi, recoge en su obra “Las Profecías de Juan XXIII” (Fontana Fantástica – Martínez Roca, 1976). En su obra narra como las profecías fueron redactadas en 1935 con un estilo propio de Roncalli: claro y poético. Estando Juan XXIII en Turquía, se afirma que el propio Roncalli tuvo una serie de experiencias sobrenaturales que le hicieron tener ciertas inquietudes por todos los fenómenos inexplicados siendo parte de una sociedad iniciática… Su lista de premoniciones es muy extensa y abarca desde el año 1935 hasta el 2033, en ellas Juan XXIII pronostica: La II Guerra Mundial. El suicidio de Hitler. Su propia muerte durante el Concilio Vaticano II Y deja abierto al futuro: Una mujer presidente en EE.UU. En el continente africano surgirá un gran dictador. El Papa se convertirá en un peregrino sin riquezas. 2033 será la fecha del Juicio Final…
Juán XXIII – El Papa Profeta
Hablar del Papa Juán XXIII es, para muchos, hablar del Papa Bueno como se le conoce y es que, ciertamente, Angelo Giuseppe Roncalli Mazzola pasó a la Historia del Papado por sus convicciones y su bondad. Nació en Bérgamo (Lombardía). En la localidad de Sotto il Monte el 25 de Noviembre de 1881 y falleció en el Vaticano (Roma) el 3 de Junio de 1963 siento pontífice de la Iglesia Católica entre 1958 y 1963. Fue beatificado por Juan Pablo II en el año 2000. En 1892 entra en el seminario de Bérgamo, siendo un alumno aventajado y escribiendo sus notas espirituales en “Diario de un Alma”. En 1901 es enviado Roma para continuar su formación en el seminario dell’Apollinare, donde se gradúa en Teología. En 1904 es ordenado sacerdote. Pronto, en 1905 es nombrado secretario de Giacomo Radini Tedeschi, obispo de Bérgamo, en dicho puesto se mantuvo hasta 1914. Cuando estalla la Iª. Guerra Mundial ejerce de sargento médico y posteriormente de capellán militar. Tras los duros años de la Guerra, en 1921, el Papa Benedicto XV lo nombra presidente, para Italia, del Consejo Central de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe. El día de San José, el 19 de Marzo, de 1925, es nombrado obispo de Areopoli; su lema episcopal sería “Obedientia et Pax” (“Obediencia y Paz”). El sucesor de Benedicto XV, el Papa Pío XI lo nombra Visitador Apostólico de Bulgaria y estableciendo relaciones con otras comunidades cristianas como la Iglesia Ortodoxa. En 1934 es nombrado Vicario Apostólico de Estambul (Turquía). Su ayuda y socorro a los judíos durante la II Guerra Mundial y el holocausto nazi fue básica, importante y crucial. En 1944, en Diciembre, Pío XII nombra a Roncalli nuncio apostólico en París y normaliza la organización eclesiástica en Francia, muy desestructurado por el colaboracionismo nazi de muchos de los obispos. El 12 de Enero de 1953 el Papa Pío XII nombra a Roncalli cardenal presbítero de Santa Prisca y tres días después le envía es Patriarca de Venecia. Con 77 años, el 28 de Octubre de 1958 es elegido Papa contra pronóstico. Eligió el nombre de Juan –por el Evangelista- y toma la Tiara de Pedro el 4 de Noviembre. Comenzó un dura reforma en la Iglesia, a él se debe el Concilio Vaticano II. Se reunio con el obispo de la Iglesia Anglicana Geoffrey Francis Fisher en Diciembre de 1960 (algo inédito) tras 400 años sin relaciones. Escribió ocho encíclicas y su magisterio social en “Pacem in terris” y “Mater et Magistra” muy valorada. Al Concilio fueron invitados miembro de otros credos, desde creyentes islámicos hasta indios americanos, e Iglesias cristianas (Ortodoxa, Anglicanos, Calvinistas, Cuáqueros, Protestantes, Evangélicos y Metodistas no presentes en Roma desde el tiempo de los Cismas). Juan XXIII muere en Roma el 3 de Junio de 1963 debido a un cáncer de estómago que no quiso operar. Su sucesor, el Papa Pablo VI en 1965 comenzó el proceso de beatificación tras la clausura del Concilio Vaticano II. Juan XXIII destacó por su calidez, por su cordialidad, por el trato afable, por ganarse el respeto y el corazón de las personas, por su humanidad extrema, por su sinceridad. Fue un Papa querido y el mundo lloro su muerte. Sus restos, embalsamado, descansan en la Basílica de San Pedro, en Roma. Pero la vida de Juan XXIII también destaca por su capacidad de anticipar acontecimientos futuros, son las denominadas profecías de Juan XXIII, profecías sobre las cuales el Vaticano guarda un respetuoso silencio pero que no niega ya que son públicas, de hecho el periodista y escritor Pier Carpi, recoge en su obra “Las Profecías de Juan XXIII” (Fontana Fantástica – Martínez Roca, 1976). En su obra narra como las profecías fueron redactadas en 1935 con un estilo propio de Roncalli: claro y poético. Estando Juan XXIII en Turquía, se afirma que el propio Roncalli tuvo una serie de experiencias sobrenaturales que le hicieron tener ciertas inquietudes por todos los fenómenos inexplicados siendo parte de una sociedad iniciática… Su lista de premoniciones es muy extensa y abarca desde el año 1935 hasta el 2033, en ellas Juan XXIII pronostica: La II Guerra Mundial. El suicidio de Hitler. Su propia muerte durante el Concilio Vaticano II Y deja abierto al futuro: Una mujer presidente en EE.UU. En el continente africano surgirá un gran dictador. El Papa se convertirá en un peregrino sin riquezas. 2033 será la fecha del Juicio Final…
Hablar del Papa Juán XXIII es, para muchos, hablar del Papa Bueno como se le conoce y es que, ciertamente, Angelo Giuseppe Roncalli Mazzola pasó a la Historia del Papado por sus convicciones y su bondad. Nació en Bérgamo (Lombardía). En la localidad de Sotto il Monte el 25 de Noviembre de 1881 y falleció en el Vaticano (Roma) el 3 de Junio de 1963 siento pontífice de la Iglesia Católica entre 1958 y 1963. Fue beatificado por Juan Pablo II en el año 2000. En 1892 entra en el seminario de Bérgamo, siendo un alumno aventajado y escribiendo sus notas espirituales en “Diario de un Alma”. En 1901 es enviado Roma para continuar su formación en el seminario dell’Apollinare, donde se gradúa en Teología. En 1904 es ordenado sacerdote. Pronto, en 1905 es nombrado secretario de Giacomo Radini Tedeschi, obispo de Bérgamo, en dicho puesto se mantuvo hasta 1914. Cuando estalla la Iª. Guerra Mundial ejerce de sargento médico y posteriormente de capellán militar. Tras los duros años de la Guerra, en 1921, el Papa Benedicto XV lo nombra presidente, para Italia, del Consejo Central de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe. El día de San José, el 19 de Marzo, de 1925, es nombrado obispo de Areopoli; su lema episcopal sería “Obedientia et Pax” (“Obediencia y Paz”). El sucesor de Benedicto XV, el Papa Pío XI lo nombra Visitador Apostólico de Bulgaria y estableciendo relaciones con otras comunidades cristianas como la Iglesia Ortodoxa. En 1934 es nombrado Vicario Apostólico de Estambul (Turquía). Su ayuda y socorro a los judíos durante la II Guerra Mundial y el holocausto nazi fue básica, importante y crucial. En 1944, en Diciembre, Pío XII nombra a Roncalli nuncio apostólico en París y normaliza la organización eclesiástica en Francia, muy desestructurado por el colaboracionismo nazi de muchos de los obispos. El 12 de Enero de 1953 el Papa Pío XII nombra a Roncalli cardenal presbítero de Santa Prisca y tres días después le envía es Patriarca de Venecia. Con 77 años, el 28 de Octubre de 1958 es elegido Papa contra pronóstico. Eligió el nombre de Juan –por el Evangelista- y toma la Tiara de Pedro el 4 de Noviembre. Comenzó un dura reforma en la Iglesia, a él se debe el Concilio Vaticano II. Se reunio con el obispo de la Iglesia Anglicana Geoffrey Francis Fisher en Diciembre de 1960 (algo inédito) tras 400 años sin relaciones. Escribió ocho encíclicas y su magisterio social en “Pacem in terris” y “Mater et Magistra” muy valorada. Al Concilio fueron invitados miembro de otros credos, desde creyentes islámicos hasta indios americanos, e Iglesias cristianas (Ortodoxa, Anglicanos, Calvinistas, Cuáqueros, Protestantes, Evangélicos y Metodistas no presentes en Roma desde el tiempo de los Cismas). Juan XXIII muere en Roma el 3 de Junio de 1963 debido a un cáncer de estómago que no quiso operar. Su sucesor, el Papa Pablo VI en 1965 comenzó el proceso de beatificación tras la clausura del Concilio Vaticano II. Juan XXIII destacó por su calidez, por su cordialidad, por el trato afable, por ganarse el respeto y el corazón de las personas, por su humanidad extrema, por su sinceridad. Fue un Papa querido y el mundo lloro su muerte. Sus restos, embalsamado, descansan en la Basílica de San Pedro, en Roma. Pero la vida de Juan XXIII también destaca por su capacidad de anticipar acontecimientos futuros, son las denominadas profecías de Juan XXIII, profecías sobre las cuales el Vaticano guarda un respetuoso silencio pero que no niega ya que son públicas, de hecho el periodista y escritor Pier Carpi, recoge en su obra “Las Profecías de Juan XXIII” (Fontana Fantástica – Martínez Roca, 1976). En su obra narra como las profecías fueron redactadas en 1935 con un estilo propio de Roncalli: claro y poético. Estando Juan XXIII en Turquía, se afirma que el propio Roncalli tuvo una serie de experiencias sobrenaturales que le hicieron tener ciertas inquietudes por todos los fenómenos inexplicados siendo parte de una sociedad iniciática… Su lista de premoniciones es muy extensa y abarca desde el año 1935 hasta el 2033, en ellas Juan XXIII pronostica: La II Guerra Mundial. El suicidio de Hitler. Su propia muerte durante el Concilio Vaticano II Y deja abierto al futuro: Una mujer presidente en EE.UU. En el continente africano surgirá un gran dictador. El Papa se convertirá en un peregrino sin riquezas. 2033 será la fecha del Juicio Final…