A pesar de existir denuncias sobre casos concretos, la UASLP atiende estos casos a través del Observatorio Universitario de Equidad y Género, pero todo queda en un proceso interno que muchas veces termina impune y que no acarrea sanción alguna para los agresores.
El acoso sexual se da en su mayoría por profesores hacia alumnas sobre todo en facultades de ciencias sociales.
El dirigente de la Federación Universitaria Potosina, Guillermo Rivera Morales reconoció que existen estas prácticas dentro de la universidad y que incluso son los propios compañeros quienes también forman parte del acoso sexual hacia las mujeres.
La Universidad ha respondido que ha dado seguimiento a dichos casos, sin embargo la investigadora Oresta López asegura que hay muchos casos en las que el acoso denuncia ha sido simplemente ignorado.
Algunas de las prácticas de acoso realizadas en grupo es el de chiflar a alguna mujer cuando pasa por algún determinado lugar de la Universidad y gritarle de piropos. En esta actividad de agresión sexual participan alumnos de ambos sexos e incluso se sabe que profesorado y personal administrativo al considerar una práctica común y hasta tradicional en la UASLP.
Ante esta situación la Universidad siempre ha mantenido silencio y ha minimizado el problema de acoso.