La NASA y la ESA habían acordado enviar dos vehículos de exploración al planeta rojo en 2018.
En el caso de Europa, este vehículo ya está diseñado y a punto de ser construido.
Sin embargo, un nuevo informe del Consejo Nacional de Investigación de los Estados Unidos afirma que la cifra probable de la parte americana de 3500 millones de dólares, tiene un exceso de 1000 millones.
La "encuesta planetaria decenal", que es sólo un documento de asesoramiento en esta etapa, recomienda un esfuerzo de reducción o bien que la misión sea pospuesta indefinidamente.
En un escenario sobre cómo la misión podría modificarse o reducirse para que quepa en el nuevo presupuesto propuesto, el informe considera la posibilidad de que el rover europeo se quede sencillamente en tierra.
No se cree que se llegue a esto, pero da una idea de las dificultades a las que se enfrentan la NASA y la ESA para desarrollar una iniciativa conjunta para aterrizar y recorrer Marte a finales de esta década.
"Estamos muy seguros de que puede hacerse una misión realmente buena por 2500 millones de dólares", señaló el presidente de la encuesta el profesor Steve Squyres, "pero lo dejamos a los dos organismos para que decidan exactamente lo que quieren."
"Fundamentalmente, creemos que las reducciones deben ser compartidas de forma equitativa entre la NASA y la ESA, porque es muy importante preservar la asociación con la ESA. No podemos cargar todas las malas noticias a la ESA; debe existir un justo reparto."
El profesor Squyres, de la Universidad de Cornell, presentó las conclusiones del informe de su grupo de trabajo, oficialmente llamado "Visión y Viajes para Ciencias Planetarias en el Decenio 2013-2022", en la Conferencia de Ciencias Lunares y Planetarias en The Woodlands, Texas.
Aunque sólo sea un documento de asesoramiento, se considera que representa los puntos de vista generales de la comunidad científica planetaria de los Estados Unidos y que por tanto guiará las decisiones políticas de la NASA.
La meta final de la NASA y la ESA es retornar muestras de rocas de Marte para su estudio en laboratorios de la Tierra.
Concepto de la misión de retorno de muestras marcianas Mars Sample Return
Por tanto, el informe estima que la oportunidad de 2018 debería ser la mayor prioridad planetaria para la NASA, la razón es que comenzaría la operación de retorno de muestras.
Mientras que el vehículo ExoMars perforaría la superficie del planeta para buscar signos de vida, el explorador estadounidense Max-C buscaría y recogería rocas interesantes. Los robots funcionarían durante buena parte de la década de 2020 recogerían las muestras que despegarían hacia la órbita antes de iniciar el regreso a la Tierra.
Las preocupaciones presupuestarias ya había instado a la NASA y la ESA a integrar sus prioridades de exploración de Marte.
La idea de poner ExoMars y Max-C en un mismo cohete y compartir el mismo sistema de aterrizaje era una consecuencia directa de este plan conjunto.
Sin embargo, el cambio de la situación financiera en los Estados Unidos implican que el enfoque de este plan deba ahora ser replanteado, señala el informe decenal.
La reciente solicitud de presupuesto para la NASA al Congreso de los Estados Unidos prevé la disminución de fondos para la agencia durante los próximos cinco a seis años, lo que significa que "ciencia por dólar" que se realice en cada misión tenga que ser cuidadosamente analizada y justificada, declaró el profesor Squyres.
"Si la meta de 2500 millones [de la contribución de la NASA para 2018] no puede ser alcanzada por cualquier motivo, nuestra recomendación es que Max-C se aplace hasta la década siguiente o que sea cancelada", declaró Squyres en la reunión de The Woodlands.
Los dos organismos deben mantener conversaciones bilaterales a finales de este mes.
Las agencias ya tienen una iniciativa conjunta a corto plazo firmada y que está preparándose: el orbitador Trace Gas Orbiter con destino a Marte en 2016 que buscará las fuentes de metano y otros gases en la atmósfera.
Los resultados de esta misión posiblemente podría guiar la decisión sobre la oportunidad de misión de 2018.
La presencia de metano es intrigante porque puede indicar tanto vida existente hoy en día o de actividad geológica, la confirmación de cualquiera de ellas sería un gran descubrimiento.
Pero lo que suceda en 2018 será objeto de una nueva discusión.
El Dr. Jim Green, director de la división de ciencias planetarias de la NASA, declaró en la reunión de Ciencias Lunares y Planetarias: "En lo que se refiere a misiones flagship (misiones de gama alta), que hemos planeado con la ESA, está claro que debemos volver a la mesa de negociaciones y plantear nuevos acuerdos si esperamos mantener nuestra relación con nuestro mejor socio extranjero hasta ahora. "
Pero las motivaciones detrás del anuncio se hicieron patentes cuando añadió: "Como todos saben, estamos en tiempos económicos totalmente distintos y hay que tenerlo en cuenta".
La segunda prioridad de la encuesta decenal son: un orbitador a Urano y otro hacia la luna de Júpiter Europa, EJSM.
Una vez más, el informe señala que a menos que estas misiones reduzcan sustancialmente los costes, la NASA debería aplazarlas y llevar a cabo misiones más baratas, de menor escala en su lugar.
En respuesta a la publicación del informe, el director de ciencia en la Agencia Espacial Europea, el profesor David Southwood, afirmó que la encuesta necesitaba ser considerada cuidadosamente antes de tomar una decisión.
"Necesitamos tener una visión clara de qué es lo que realmente quieren hacer los estadounidenses," declaró Southwood a la BBC. "También necesitamos tener claro en qué medida, los norteamericanos nos seguirán si nos comprometemos a hacer algo." Se trata de cooperación.
"Nos reuniremos a finales de marzo y esperamos tomar decisiones acerca de a dónde vamos. La encuesta decenal plantea muchas preguntas y tenemos que responder".
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Publicado en Odisea Cósmica¡Suscríbete Ya!