Hamamelis es un género en el que se encuentran cuatro especies de plantas con flores que pertenecen a la familia Hamamelidaceae. Se trata de arbustos o arboles pequeños de hasta 8 metros de altura. Tienen hojas alternas y ovaladas de hasta 16 cm de largo y 11 cm de ancho con bordes lisos u ondulados dependiendo de la variedad.
Las flores se producen en los tallos deshojados pro el invierno, cada flor tiene cuatro pétalos delgados de 1,2 cm de largo de color anaranjado, amarillo o rojo. Se trata de una planta ornamental muy apreciada, pero también debemos de considerar sus beneficios en lo que salud y belleza se refiere.
La corteza de la hamamelis es astringente, con ella se preparan extractos muy utilizados en medicina herbaria. Es uno de los extractos empleados en medicamentos contra las hemorroides, lociones para el afeitado y picadura de insectos.
Para las venas inflamadas
Las numerosas propiedades de esta planta ayudan a desinflamar y aliviar la pesadez y el dolor que generan las venas inflamadas. Es por ello que se emplean para tratar problemas de varices, urticaria, quemaduras y hemorroides.
Si se consume, puede aliviar los sofocos producidos por la menopausia.
Las hojas contienen flavonoides y taninos, principios activos que contribuyen al tratamiento de los trastornos circulatorios. Los taninos tienen acción venotónica, contribuyen a la contracción de capilares, venas y vasos sanguíneos lo que favorece la circulación.
Los flavonoides cuentan con una acción vitamínica P, la cual con tribuye a aumentar la resistencia de las venas pequeñas y capilares disminuyendo la permeabilidad capilar, responsable principal de los edemas y la inflamación.
Su uso está especialmente recomendado para aquellas personas que realizan trabajos que someten a presión sus piernas o personas afectadas por hinchazón en las piernas y los efectos del mal retorno venoso. Tratar estos problemas con hamamelis alivia el dolor y la hinchazón.
Si se aplica sobre los moratones alivia el dolor, reduce la hinchazón y ayuda a eliminar el color morado más fácilmente.
Para el cutis
El agua de hamamelis se emplea en cosmética para el cuidado de la piel. Se emplea con mucha frecuencia en cremas para piel mixta y en lociones para después de la depilación química o con cera.
Se emplea también en el caso de quemaduras solares pues ayuda a prevenir su infección y alivia el ardor y el posible edema que puedan presentar.
Astringente
Sus propiedades astringentes se emplean en dos sentidos. Internamente para disminuir las secreciones y reducir la inflamación y el sangrado y externamente para secar la piel contrayendo los tejidos y previniendo las secreciones.
En su uso externo se emplea para facilita la cicatrización de heridas y combatir algunos tipos de dermatitis. El extracto destilado se emplea para calmar el dolor en el caso de hinchazones dolorosas y su uso en compresas facilita el tratamiento de lesiones cutáneas e infecciones localizadas en la piel.
Menopausia
Una infusión de una cucharadita de hojas secas de hamamelis por taza de agua ayuda a combatir los sofocos provocados por la menopausia.
¿Donde se consigue el hamamelis?
A día de hoy, el hamemelis lo podrás encontrar en varias tiendas especializadas en nutrición, como en los herbolarios y herboristerías. Lo puedes encontrar en forma de plantas como en capsulas o infusión.
Otros beneficios del agua de hamamelis
Efectos secundarios del Hamamelis
- Los taninos presentes en las hojas pueden llegar a irritar la mucosa gástrica. Se recomienda consumir la infusión con alimentos ricos en mucílagos.
- No se debe de consumir en casos de gastritis o de úlcera gastroduodenal.
- No debe de ser empleada en niños ni en personas con problemas etílicos en el caso de presentaciones con contenido alcohólico.