El flamante grupo de trabajo formado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) para realizar reformas al Sistema Privado de Pensiones (SPP) tendrá cuatro meses para entregar una propuesta técnico-normativa.
De lo que se trata, según explica un escueto comunicado del MEF, es de ampliar la cobertura del sistema de pensiones y extender una mayor protección social a la población ante el riesgo de menores ingresos en la etapa de vejez, además de promover el desarrollo de mayor competencia.
En efecto, una debilidad estructural del SPP es que su crecimiento depende del avance de la formalidad y no solo del crecimiento económico. Por eso, luego de 10 años de variaciones positivas del PBI y 18 años de existencia del sistema, solo un 40% de la PEA (4,8 millones de personas) está afiliado a una AFP, y solo la mitad, aproximadamente, realiza aportes periódicos.
El grupo de trabajo, creado por Resolución Ministerial 756-2011-EF/10, estará formado por nueve personas: un representante del MEF; uno del Banco Central de Reserva; uno de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS); dos representantes del Congreso; y un equipo de cuatro profesionales expertos en la materia integrado por los economistas Juan José Díaz Noziglia (SIEP y Grade), Waldo Mendoza Bellido (U. Católica), Javier Olivera Angulo (U. de Essex) y Gustavo Yamada Fukusaki (U. del Pacífico).
Cabe indicar que a fin de ampliar la cobertura, se discutió la incorporación obligatoria de los trabajadores independientes reteniendo sus aportes, pero la propuesta no floreció.
“Lo que pasa es que hay una fuerte reticencia de las personas a ahorrar para el largo plazo y prefieren concentrar su gasto en el presente [...]; por eso, tenemos que ver qué estrategia seguir, mirar casos internacionales, porque ya hemos visto que, así nomás, espontáneamente, no sucede”, explica Yamada.
Sin embargo, también es cierto que la estrategia de ampliar el consumo a través –entre otras herramientas– del crédito (lleve hoy y pague otro día) termina por incitar esta visión cortoplacista de la que nos quejamos todos.
Sin representantes
La presidenta de la Asociación de AFP, Beatriz Merino, saludó los objetivos de la resolución, por ser un pronunciamiento, por parte del Gobierno, que reconoce claramente al sistema como una pieza fundamental en la consolidación macroeconómica del país, la sostenibilidad fiscal y el desarrollo del mercado financiero.
Señaló que es importante porque se trata de una declaración de principios que nadie puede cambiar.
Respecto de por qué las AFP no tienen representantes en la comisión del MEF, Merino comentó: “Seguramente han querido hacer algo parecido a lo realizado por la Comisión Marcel en Chile, en la que tampoco participaron las AFP y tuvo un gran resultado”.
Los dos representantes del Congreso, por cierto, no tienen que ser legisladores.
Legitimidad y crecimiento
La preocupación por legitimar la industria de las AFP frente a la población sigue siendo un punto muy importante en la agenda de la Asociación de AFP. Que solo el 20% de los trabajadores aporte a un fondo de pensiones representa una debilidad política innegable para el sistema, si acaso el gobierno buscara hacerse de los recursos administrados por las AFP, a lo Kirchner. Por eso, ampliar la cobertura y publicitar sus buenas obras y su utilidad para la sociedad es fundamental. En ese sentido va la resolución del MEF, que reconoce la importancia del aporte del sistema. No obstante, al final, los números son lo que cuentan.
Las cifras
20% del total de la PEA aporta a un fondo de pensiones privado, según el comunicado del Ministerio de Economía.
S/.80.000 millones son administrados por las AFP, pero solo la mitad de los 4,8 millones de afiliados realiza aportes.
US$1.500 millones en dos proyectos de infraestructura en los que participarían las AFP se encuentran actualmente en camino. Este es uno de los vehículos con los que cuenta el sistema privado para generar infraestructura de utilidad para todos los peruanos.
Diario El Comercio (27.10.2011)