Protocolo del vino

Por Decantare @decantare

Con esta entrada no queremos ponernos excesivamente “sibaritas”, ni expertos, pues beber una copa tampoco debe ser nunca una odisea, pero si conocemos algunas reglas básicas sobre el protocolo del vino podremos desenvolvernos con más soltura en cualquier reunión con amigos y familiares.

Cuando se trata de disfrutar de una copa de vino, existe todo un ritual en el que conviene tener claros algunos conceptos importantes para no echar por tierra toda la experiencia.

El maridaje del vino

Simplemente partiendo de si vamos a degustar el vino solo o en compañía de otros alimentos, debemos tener en cuenta el maridaje para tomar la mejor elección, si navegas por nuestro blog descubrirás un amplio abanico de sabores con los que acompañar un vino.

Si tienes previsto descorchar varias botellas, es recomendable empezar siempre por los vinos blancos y posteriormente por los tintos. Por otra parte, si existen varios tintos, comenzamos siempre por los más ligeros y jóvenes, dejando para el final los de mayor edad y más generosos ya que por lo general, el menú irá ganando en intensidad desde los sabores más suaves de los entrantes a los más fuertes y contundentes de los platos principales.

El descorche del vino

A la hora de abrir la botella, es recomendable cortar la cápsula, si la tiene, por debajo del anillo que sobresale de forma que al servir el vino, el líquido no recoja la suciedad que pueda haber acumulado la cápsula.

Para retirar el corcho utilizaremos un sacacorchos que sea cómodo para no ponernos en peligro ni nosotros ni la botella, para ello son útiles los sacacorchos de dos tiempos. Presta atención a no agitar demasiado la botella durante el proceso de descorche. Tampoco conviene atravesar el corcho completamente ya que así corremos el riesgo de que el corcho se rompa o caigan trozos de corcho en el interior, por lo que lo introduciremos algo más de la mitad.

Una vez retirado el corcho limpiaremos el cuello interior de la botella si hubiese algún resto de corcho o suciedad y realizaremos una cata rápida para asegurarnos que el vino está en buen estado, sobre todo si hemos tenido guardada la botella durante mucho tiempo en casa.

El servicio del vino

Cuando vayamos a servir el vino debemos prestar atención a las copas dependiendo del tipo de vino que vayamos a consumir, aunque en el mercado existen modelos de copas para casi cada variedad, simplemente fijémonos que sean adecuadas según su forma y tamaño:

  • Vinos tintos. Copas grandes con forma de globo para que respire el vino.
  • Vinos blancos. Copas más pequeñas para evitar que pueda calentarse.
  • Vinos espumosos. Copas alargadas para conservar más tiempo las burbujas.

A la hora de llenar las copas, nunca las llenaremos al máximo, generalmente a un tercio de su capacidad o incluso menos ya que con ello lograremos mantener mejor la temperatura en cada caso. Si se trata de vino blanco o espumoso lo serviremos frío, entre 7 y 10 ºC, los rosados ligeramente frescos, mientras que los tintos los serviremos a temperatura ambiente entre 16 y 18 ºC. Si estamos en verano, tendremos en cuenta la temperatura ambiente para disfrutar del vino a una temperatura más agradable.

Con estos pequeños consejos sobre el protocolo del vino estamos seguros que disfrutar de una botella de vino será una experiencia mucho más enriquecedora para ti y para tus invitados. En próximas entradas nos detendremos con más detalles en algunos aspectos del servicio para seguir profundizando ¡Salud!