Para los amantes del queso aquí os traigo un rico entrante para San Valentín, si lo queréis hacer aún más romántico, le podéis dar al queso forma de corazón, el único problema es que al meterlo al horno se os va a derretir y no se os va a quedar tampoco con la típica forma de corazón, pero seguro que echándole un poco de imaginación vuestra pareja ve el amor que habéis puesto en este plato. Ingredientes:- 200 gramos de queso provolone.- 150 gamos de champiñones laminados.- Media cebolla.- 2 dientes de ajo.- Aceite de oliva virgen extra.- Hierbas provenzales.- Orégano. - Sal. Elaboración: Lo primero que vamos a cocinar son los champiñones que es lo que más tarda en hacerse. En una sartén echamos un chorro de aceite de oliva, picamos la cebolla y el ajo en trozos menudos y se lo añadimos a la sartén. Cuando casi este dorada añadimos los champiñones laminados y lo dejamos hasta que casi estén cocinados. En una fuente apta para horno echamos un chorro de aceite y las hierbas provenzales al gusto, colocamos el queso provolone en medio y por los lados los champiñones cocinados. Pegamos unos cortes al queso y echamos un poco más de aceite y orégano para que coja todo este sabor. Lo metemos al horno, previamente precalentado, durante 10 minutos a 200 grados y ya está listo para comer. Tiempo de preparación: 35 minutos.Gasto: 3 euros.Raciones: 2 raciones. Dificultad: Fácil.