La tarde la dedicamos a visitar un poquito San Cristobal de las Casas, que cada vez me gusta más, es un pueblo con muchísimo encanto, con las casas típicas coloniales, iglesias muy pintorescas y un ambiente callejero bastante interesante.
Hoy hemos ido a ver el Cañón del Sumidero, un viaje de dos horas en barco bastante bonito, un cañón muy profundo y navegable porque subió el nivel del agua cuando construyeron la presa para eneregía eléctrica. Está lleno de zopilotes (carroñeros), garzas, pelícanos, cormoranes, monos araña y cocodrilos.
A la vuelta hemos parado en Chiapa de Corzo, un pueblito que tiene una fuente que recuerda a la corona de los reyes de España de la época de las colonias, allí nos hemos tomado una michelada, que es un vaso con chile, salsa inglesa, sal, jugo de tomate, un dulce de tamarindo y cerveza, está bueno y malo al mismo tiempo...