Creo que en estos momentos en España nos ocupa demasiado el "circo catalán", porque ya no se le puede denominar de otra manera, y no estamos prestando la debida atención a la reciente "amenaza de guerra nuclear" por parte de Corea del Norte ante Naciones Unidas... y la respuesta del Secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, durante su visita a Corea del Sur, quien afirmó literalmente que "Si Corea del Norte usa un arma nuclear, habrá una respuesta militar masiva".
Y claro, Donald Trump no iba a quedarse callado...
Este intercambio de amenazas, estando Trump y Kim Jong-un al frente de los dos países en conflicto, puede desencadenar perfectamente una guerra nuclear a mi entender. Trump por supuesto no se ha callado y ha manifestado que "Las armas nucleares que están desarrollando no los protegerán" instando a Kim Jong-un a no subestimar a los Gobiernos de Washington y Seúl.
Esto es muy serio, mucho más que la "charlotà" que han protagonizado cuatro cantamañanas en la "simbólica proclamación de la República independiente de Catalunya" y a quienes los medios informativos destinan toda su atención, no prestando la que se merece, a mi entender, el que estemos ante la posibilidad, Dios no lo quiera, de vivir un conflicto nuclear a escala mundial.
Y es que, una vez pasado el mal chiste de Puigdemont y los teleñecos, aunque promete seguir para largo el temita... porque aunque hayan perdido toda la credibilidad del mundo, que la Unión Europea y la totalidad países de Naciones Unidas hayan rechazado reconocer la simbólica república, que sólo hayan conseguido el apoyo de unos pocos congresistas pertenecientes a la extrema derecha belga, cosa que no es que ayude mucho, y que no hayan querido ni verle en el Parlamento Europeo, querrán hacerse oír y demostrar que no han desaparecido... y eso implica hacer ruido de una manera u otra...
Bueno, que creo que ya nos ha quedado claro a los españoles todo el "problema catalán" y que aunque no se haya acabado el culebrón, yo pediría a los medios de comunicación que siguieran más esta noticia ante la posibilidad de un suceso de dimensiones catastróficas, que pueden provocar, posiblemente, los presidentes de los dos países más armados y los dos presidentes con menor coeficiente intelectual y sentido común de la historia. Es duro pero lamentablemente creo que es así.
¡Que Dios nos pille confesados!