La escoliosis es una contraindicación relativa para la anestesia epidural, ya que dependerá del grado de curvatura que sufra, además de si se han producido alteraciones secundarias vertebrales.
La técnica consiste en inyectar el anestésico a través de dos vértebras. Para ello, el anestesista precisa tener unas referencias anatómicas correctas. En estos casos, la valoración de si se puede o no realizarla la tiene que hacer el propio anestesista tras examinarla.