Iniciándose el siglo XX aparecieron en La Habana dos grupos de empresarios y propietarios de terrenos. Uno de ellos exigía la unión del centro de la ciudad con los terrenos del este al otro lado de la bahía; el otro grupo, promotor del desarrollo urbano del barrio de Miramar clamaba por la unión rápida con esa parte al oeste de la capital.
El segundo grupo venció en la querella y en 1907 apareció en primer proyecto del viaducto sobre el río Almendares, desapareciendo el freno para el desarrollo de los repartos Miramar, Country Club, Coolí y Alturas de Almendares.
Hasta ese momento el río se cruzaba sobre un puente colgante muy estrecho, solo como vía peatonal. Los carruajes y coches eran cruzados por un bongo o canoa.
Este el primer puente de hormigón armado construido en Cuba y muestra un arco de 58 metros de luz que fue reconocido en toda la isla y fuera de esta.
El puente se apoya en una balsa de hormigón armado, debido a que una tremenda cantidad de pilotes fueron enterrados sin lograr encontrar el firme; esta balsa permitió aceptar la propuesta de la Havana Electric Raiway Co. La compañía correría con los gastos para la ampliación del puente a una doble vía y colocaría todas las luminarias y la corriente; además del mantenimiento del pavimento. La cercanía de la fábrica de cemento: “EL ALMENDARES”, ayudó mucho en el desarrollo ejecutivo de la construcción.
El puente se inauguró el 23 de enero de 1911.