Número de páginas: 432
Sinopsis: Oliver, un joven londinense con una peculiar situación familiar y una triste pérdida, hereda una casona colonial, Villa Marina, a pie de playa en el pueblecito costero de Suances, en Cantabria. En las obras de remodelación se descubre en el sótano el cadáver emparedado de un bebé, al que acompaña un objeto que resulta completamente anacrónico. Tras este descubrimiento comienzan a sucederse, de forma vertiginosa, diversos asesinatos en la zona (Suances, Santillana del Mar, Santander, Comillas), que, unidos a los insólitos resultados forenses de los cadáveres, ponen en jaque a la Sección de Investigación de la Guardia Civil y al propio Oliver, que inicia un denso viaje personal y una carrera a contrarreloj para descubrir al asesino.
Opinión personal
Le tenía echado el ojo a este libro desde que salió, ya que como sabréis me encantan los thrillers y novelas policíacas, y los que están ambientados en el norte de España más aún. Cuando vi en otros blogs y redes sociales la buena acogida que estaba teniendo, terminé de decidirme y me puse manos a la obra con su lectura.
Los días que tu no me quieras, te querré yo por los dos.Los capítulos del presente se ven intercalados con otros escritos a modo de diario, no sabremos por quién hasta el final, que narrará la caída de la república y comienzo de la guerra en la zona de la costa Cantábrica, tomando como base las regiones de Hinojedo, Ubiarco, Comillas y Santillana del mar, una zona en la que los republicanos se refugiaron durante años en los montes viendo con horror los bombardeos, y dónde muchas familias se rompieron para intentar permanecer a salvo. Una de esas familias es la de Jana, que junto a sus padres y hermanos verán como su vida cambia por completo con el inicio de aquel negro periodo.
María Oruña publicó una primera novela hace más de veinte años, pero este era mi primer acercamiento a la autora y la verdad es que me ha encantado su forma de narrar. A través de su prosa queda patente que domina el lenguaje y la narrativa, ya que el resultado es un libro realmente bien escrito - con la proporción perfecta entre descripciones, diálogos, cavilaciones de sus personajes...- sea tan fácil de leer que te sorprendas a ti mismo prometiéndote en vano que el siguiente será el último capitulo que leas antes de parar.
En cuanto a los personajes, se nos presentan poco a poco y cuando queramos darnos cuenta, pues lo consigue de forma muy sutil, sabremos muchísimas cosas sobre ellos, ya que todos tienen sus secretos y rincones oscuros. La alegría más grande llegó al saber que existirá una segunda novela que contará con los mismos personajes de esta primera, y es que no me sentía preparada para despedirme definitivamente de ellos.
En definitiva, si eres amante de los thrillers y novelas policíacas cargadas de investigaciones pero en la que los personajes y sus historias también tienen un peso importante, no puedes dejar pasar Puerto Escondido.
PD: Yo soy de las que se fijan mucho en las ediciones, de las que piensan que aunque la portada no lo es todo, pues por muy bonita que sea lo importante es la historia que nos cuenta y cómo lo hace, es muy, muy importante ver que la editorial ha cuidado tanto la apariencia estética del resultado final, como el autor, o la autora, ha cuidado lo que tanto trabajo le ha costado crear. En este caso me ha gustado mucho el detalle de esta novela de que detrás de esa foto de portada tan bonita, y tan del norte, se esconde en su interior, y tras sus solapas, una ilustración de un mapa de toda la zona donde se desarrolla al libro. Son esos pequeños detalles que, no por ser pequeños pasan desapercibidos y que yo como lectora agradezco mucho.