Duración: 2horas 29minutos
Presupuesto: 20 millones de dólares
Recaudación: 11 millones de dólares
→ Lo mejor: -Tiene algunos puntos de paranoia y locura muy divertidos.
→ Lo peor: -Un ritmo demasiado cansino, que aburre muchooooo.
Puro Vicio es una historia surrealista, descontrolada y rebuscada, contada con un aroma a hierba buena que más quisiera el gran Bob Marley.
Y aunque a veces parpadeaba y creía ver al Gran Lebosky, hay que reconocer que la trama que nos cuentan, aunque en ocasiones excesivamente liada, es un toque distinto a las historias lineales que acostumbramos a ver en la pantalla grande.
Podría resumiros de que va, pero no se entendería un carajo, y escribir por escribir pues tampoco es lo mío (jajajaja a quien intento engañar).
También tengo que admitiros, que con el paso de la cinta, el desenlace asoma un poco su patita por debajo de la puerta, y podremos intuir alguna de las paradojas que agobian a nuestro porrado inspector Doc.
Una película de más de dos horas, explicada con mucha parsimonia, como si el humo de toda la hierba que se fuma el protagonista se haya extendido por el set de rodaje, y les haya apalancado y empanado a ellos también. La historia se explica con una tranquilidad exasperante, les cuesta avanzar y resulta realmente pesada.
Y manda narices que sea tan aburrida, cuando la trama podría ser una locura digna de admirar, pero a cambio se reduce a solo algunas escenas peculiares que son lo mejor de toda la película, las alucinaciones de los guionistas en algunas partes del film son realmente geniales. Lástima que después se diluya de nuevo en un paseo apaciguado de un inspector fumado a todas horas del día.
Así en plan curiosidad, tengo que deciros que se me hizo muy rara la presencia de Owen Wilson (esta curiosidad está destinada a que la crítica no quede excesivamente corta).
Hippies, poder, drogas sintéticas, secuestro, ansias de dinero, amantes, sexo, come-conchas, compañerismo, traición, manipulación, indiferencia, y hierba mucha mucha hierba.
Todos estos mensajes son abarcados, detallados y cuidados con mucho cariño, pero el estilo del director es muy suyo, y por mucho que detalle todos los perfiles de los personajes y la historia, ésta es demasiado enrevesada y tendrás que prestar demasiada atención a la película para poder acabar de comprenderla o simplemente seguirla.
Y que queréis que os diga, para mi el cine es disfrutar tranquilamente de una historia más o menos buena (con su reflexión), pero cuando veáis este film estaréis tensos intentado comprender que diablos pasa, o relacionando las mil subhistorias que nos han entrado por nuestras pupilas dilatadas de la Marihuana llamada Puro Vicio (atentos que después de los créditos hay un examen escrito, si lo suspendes pagas un extra de 1,95€ así compensan el fracaso en taquilla).
El final mira por donde me gustó, creo que es lo más delirante y a la vez gracioso de la cinta, cierran el circulo de manera estridente pero elegante. Me pareció una forma muy original de mostrarnos algo que ya nos intuíamos desde hace media hora (pero como el director anda fumado llega un poco tarde).
No quiero alargarme mucho más, Puro Vicio cuenta de una forma peculiar y demasiado estirada una historia un tanto liosa, se me hizo pesada en muchos momentos, y es menos hilirante de lo que el propio director se cree, intenta transgredir al espectador y fracasa estrepitosamente en su intento.