Un español se confiesa español en China y, en España, otros españoles le acusan de ser un traidor español.
Entonces, el español, para congraciarse con esos españoles que lo tachan de renegado español, asegura que se declaró español porque no pensaba que se llegaría a saber en España.
Viva Espanya y viva el Espanyol. Y viva Carles Puyol.