La primera miniserie de Lapham se llamó Crossed: Family Values, y vino dibujada por Javier Barreno. Con el cambio de equipo no sólo se perdió a nivel artístico. El dibujo de Barreno resultaba decepcionante al lado del sensato trabajo de Burrows, y Lapham consiguió un resultado poco sorpresivo, hizo que el planteamiento perdiese en profundidad y sólo se buscó una exhibición de atrocidades en las que se perseguía el más lejos todavía.
Ahora Avatar acaba de publicar en Estados Unidos el primer número de Crossed: Psychopath, nueva miniserie también con guión de Lapham, que en esta ocasión está asistido por Raulo Cáceres como dibujante. El nivel sigue descendiendo y ya va en caída libre. El dibujo de Cáceres es torpísimo, casi de principiante, y el guión es directamente absurdo. Una mera coartada para mostrar situaciones que de puro exageradas son ridículas e inintencionadamente hilarantes.
Lapham escribe diálogos estereotipados, su historia pretende ser adulta a base de mostrar sexo y violencia, pero el rutinario desarrollo no podría ser más infantil, y en lo único que encaja con el dibujo de Cáceres es en que ambos resultan igual de envarados. Sólo satisfará a los fans más cerriles. Es una pena que una buena idea de partida haya ido a parar a esto.
Fran G. Lara